miércoles, 31 de diciembre de 2014

5 Estrategias para lograr que los niños escuchen

Últimamente oigo mucho esta queja por parte de los profesores: los niños y jóvenes no escuchan, y no prestan atención, lo que supone un desgaste de energía enorme para el profesor hasta que logra un mínimo de atención y escucha activa por parte de los alumnos.
También es una constante en las charlas entre madres y padres: “Es que no hacen caso”, “Me canso de repetir las cosas y nada”, “Es como hablarle a la pared”…
No estamos ya en la época del autoritarismo, donde el profesor hablaba y los alumnos escuchaban con miedo a participar, donde los padres decidían y los niños acataban sin rechistar. Estamos en la época en la que nos jactamos de utilizar el diálogo, pero ¿sabemos dialogar?.  A dialogar también se aprende, y  el diálogo como forma básica de interacción  y aprendizaje también se enseña, y una de las cosas más importantes en este punto es aprender a escuchar.
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Me han parecido buenas y prácticas las estrategias que propone  Rebecca Alber en el blog de Edutopia para motivar la escucha activa en los alumnos, y que traducidas por mí y aportando mi pequeño toque personal serían las siguientes:
5 Estrategias para lograr que los niños escuchen
1. Dilo sólo una vez.
Cuando los niños se acostumbran a oír las órdenes una, dos, tres, hasta cuatro veces.., ¿para qué van a prestar atención a la primera?
Recálcales que tú acostumbras a dar la orden una sola vez. Si alguno, a pesar de ello, anda distraído (que será lo más normal) no le repitas la orden tal cual lo hiciste anteriormente, dale alguna pista sobre lo que has dicho previamente, y recuérdales que deben contar hasta 3 antes de preguntarte. De ese modo se aseguran de no preguntar cosas que igual ya saben.
2. Habla, muévete y para.
Mientras explicas o hablas acerca de un tema en concreto, haz que estén atentos, avisándoles de que harás pausas y elegirás a uno de ellos para que les explique a los demás su visión acerca de lo que han escuchado.
También puedes hacer pausas para que ellos hablen entre sí acerca de lo que han escuchado (lo que también te sirve a ti para comprobar su comprensión)
3. Utiliza “señales manuales”.
Se trata de signos que les permita expresar opiniones acerca de lo que se está escuchando en clase.
Por ejemplo, puedes leer un texto de opinión o una cita de algún personaje histórico y puedes pedirles su opinión del siguiente modo: “Los que estéis de acuerdo, levantáis un dedo; los que no lo estéis levantáis dos, y los que estéis indecisos levantáis tres.”
Esta estrategia permite la participación de toda la clase, y “da voz” a aquellos más tímidos.
4. Prestar atención, parar y parafrasear.
Conocer estrategias para escuchar a los demás e interpretar sus puntos de vista es una habilidad básica e imprescindible.
Cuando los niños trabajan en grupos se puede utilizar la siguiente técnica:
a. Asigna un portavoz por grupo de trabajo (que puede ir rotando)
b. Pide a los demás que escuchen atentamente y eviten interrumpir mientras el otro habla. Sólo deben escuchar.
c. Cuando la persona que está hablando deja de hacerlo, entonces los demás parafrasean algo que el compañero ha dicho: “Tú crees que…”, “No estás seguro de…”, “Para ti es importante…”
d. Después de ello, pueden continuar con un enunciado centrado en el “Yo”: “Ya veo lo que quieres decir…”, “No estoy de acuerdo con lo que dices…”
 Utilizar este tipo de frases y parafrasear constituye una herramienta muy útil para los alumnos, para aprender la forma correcta de escuchar y de mantener una conversación.
5. Que planteen sus propias preguntas
Cuando los alumnos estén escuchando un discurso, viendo un documental o escuchando una historia leída por otros interrumpe varias veces para que escriban preguntas acerca de lo que acaban de escuchar.
De este modo se activa su escucha, atendiendo a aquellos aspectos que no tienen clavos o que pueden presentarles dudas.
Es cierto que “entrenamos” más para dar respuestas que para hacer preguntas, pero con esto último conseguimos poner el foco de atención en aquello que los alumnos no han entendido o que para ellos puede ser un verdadero “misterio”.
Por último, hay que transmitir a nuestros alumnos la importancia y el valor de saber escuchar, y enseñarles las técnicas verbales y no verbales para ello (mantener el contacto visual, mostrar interés, no cortar la conversación de los demás…)
“Una de las más sinceras muestras de respeto hacia el otro es, sin duda, prestar atención a lo que dice”

Buscando al profesor particular ideal

Para mejorar los resultados de aprendizaje de los estudiantes, muchos padres optan por reforzar los contenidos en la casa.
La mayoría de los padres esperan hasta la entrega de notas para reconocer cuáles son las asignaturas que dificultan o disminuyen el promedio general de sus hijos, tomando como esto la primera alerta para buscar ayuda complementaria a la escuela, es decir, contratar a un profesor particular para que refuerce esos contenidos de aprendizajes en el hogar del estudiante.
Recomendamos que lo primero que debes observar es cómo estudia tu hijo, si asiste regularmente a clases, tiene los útiles escolares necesarios, su capacidad de concentración, si cuenta con un hábito de estudios y/o un horario determinado para realizar sus tareas en casa. Tras detectar cuál es el punto débil de tu hijo, comienza a buscar quien puede servir de apoyo para su estudio.
Luego para buscar a un profesor particular idóneo, debe ser alguien profesional que genere confianza tanto en los padres como en el niño, si bien es un gasto económico extra para la familia, debe tomar en cuenta que esta persona viene a reforzar los contenidos de aprendizaje expuestos en el colegio, resolver las dudas que quedaron pendiente en clases y motivar al estudiante a generar un hábito de estudio, si éste no lo tiene.
Con frecuencia, algunos padres optan por continuar las clases particulares durante el verano, donde el profesional debe fortalecer su ritmo de enseñanza, solicitando incluso tareas para que el niño mantenga y mejore las habilidades que se ven disminuidas en ciertas asignaturas.
Profesionales y estudiantes
En la actualidad son muchos los profesionales y estudiantes, que no necesariamente son pedagogos, quienes ofrecen sus servicios de clases particulares para los alumnos de educación básica y media. Siendo las con alta demanda, las matemáticas y la física, que pueden ser enseñadas por diferentes ingenieros, ya que incluso los profesores con mención en matemática escasean en nuestro país.
Para mayor seguridad de los padres y conocer la diversas ofertas recomendamos el sitio "Soy Profe" , una plataforma gratuita que cuenta con más de 500 profesores y estudiantes universitarios registrados que buscan enseñar a aquellas personas que quieran aprender.
El sitio tiene un buscador que permite seleccionar la asignatura, curso y región, la cual arrojará un profesor que tendrá, no sólo sus datos profesionales, sino también la calificación realizada por los usuarios. Aquí también los padres pueden consultar por mensaje privado detalles de las clases y ver los valores que tienen las sesiones. (Costos acorde al mercado).

martes, 30 de diciembre de 2014

La Curiosidad mato el aburrimiento

Conversando con Marcia en mi casa de Chosica, me conto la siguiente anecdota: Una profesora pide a los alumnos que localicen el tema en el libro de ciencias. Lo leen y colquen en la pizarra un gráfico o imagen con las fases lunares. Explica por qué se producen y enumera las distintas fases mostrándolas con una imagen. Los alumnos hacen los ejercicios correspondientes en su cuaderno. La profesora pone un video, donde se aprecian, secuenciadas, las distintas fases lunares. A continuación hace la siguiente pregunta: “¿Por qué no vemos a la luna siempre del mismo modo?” Los alumnos comienzan a dar sus respuestas, unas más acertadas que otras, pero sin criticar ninguna, sigue haciendo más preguntas, guíandoles hasta que llegan por ellos mismos a la explicación correcta.
Hay una clara diferencia entre estas dos situaciones: una promoverá la curiosidad de los niños, la otra, muy poco.
Entonces yo le pregunté a Marcia,  ¿Qué es curiosidad y como funciona?
“La curiosidad surge cuando la atención se enfoca a un vacío de información en el propio conocimiento. Estos vacíos producen la sensación de privación, que llamamos curiosidad. El individuo curioso está motivado para obtener la información que le falta, o para reducir o eliminar la sensación de privación.”
Para Marcia, ésta no es sólo un estado de ánimo, sino una emoción, un poderoso sentimiento que nos empuja “más allá”, a buscar el conocimiento que nos falta. “La curiosidad, lo que es diferente y sobresale en el entorno, enciende la emoción.Y con ella, con la emoción, se abren las ventanas de la atención, foco necesario para la creación de conocimiento.”
No hay muchos estudios neurológicos acerca de la curiosidad, pero conocer qué factores la estimulan a nivel cerebral podría ayudarnos para provocarla en aquellas personas menos “curiosas”.
Lo que sí que se ha descubierto es que la química de nuestro cerebro cambia cuando sentimos curiosidad por algo, y estos cambios neuroquímicos nos ayudan a aprender y retener mejor la información.
•Las personas aprenden mejor aquella información sobre la que sienten curiosidad.
•Cuando el cerebro se encuentra activado en “modo curiosidad”, recuerda mejor incluso la información incidental o no relevante en ese momento.
Esta capacidad del cerebro “curioso” para recordar y aprender es un fenómeno del que los profesores deben ser conocedores y utilizar a diario en el aula. Pero, ¿no son los niños ya de por sí, curiosos por naturaleza? Sí, aunque algunos más que otros,  entonces “Por qué a los niños no les gusta ir al colegio“, es porque simplemente “Al cerebro no le gusta pensar”, y si puede recurrir antes a la memoria para solucionar un problema o aprender un concepto nuevo lo hará, antes de tener que invertir energía pensando. Por ello, para incentivar a las personas a pensar y a aprender cosas nuevas hay que establecer las condiciones cognitivas adecuadas. ¿Cómo?
1. Enfrenta a tus alumnos a problemas que les suponga un desafío, pero que no sean tan difíciles como para frustarlos.
Trabajar en equipo para solucionar un problema, o realizar una propuesta o actividad sobre algún tema, que después será evaluada por el resto de la clase despierta el interés por adquirir más información que la únicamente facilitada por el profesor.
Por esta razón, el Aprendizaje Basado en Proyectos es una metodología tan eficaz en cuanto a motivación, ya que estimula continuamente al alumno a explorar nuevos conocimientos que satisfacen su curiosidad.

2. Comienza siempre con una pregunta.
Los adultos estamos demasiado “predispuestos” a hablar,a corregir y a contestar, pero no le dedicamos tanto tiempo a preguntar. Las preguntas abren siempre un “vacío de información”, que activa al cerebro a completar esa carencia:
“¿Por qué vemos el cielo de color azul?”
“¿Cómo sabemos lo que pesa la Tierra?”
“¿Qué les pasaría a los astronautas si no llevaran traje espacial?”

3. Enciende el fuego.
La curiosidad requiere de un conocimiento inicial. No podemos sentir curiosidad sobre aquello de lo que no sabemos absolutamente nada. Sin embargo, tan pronto como conocemos algo que despierta nuestro interés, queremos saber más…Para activar el estado de curiosidad hay que “encender el fuego” con alguna información intrigante pero incompleta. Utilizar videos, historias  de personajes reales, metáforas, hacer debates sobre algún tema…, puede servir como introducción a un tema y es una forma de despertar la curiosidad sobre ello. Por ejemplo, contar una historia previa a una clase.
“El aburrimiento se cura con la curiosidad. La curiosidad no se cura con nada.”

La Educacion en el Peru

“En el Perú existe una gran oferta laboral docente muy importante, Según el Censo Escolar último, el Estado peruano emplea a 324,995 educadores, aunque los índices de oferta del empleo muestra que existe un 10% (58,281) de educadores desempleados. El presente año 2013 el Ministerio de Educación ha presupuestado  51,000 plazas de contrato a nivel nacional.
El acelerado crecimiento de instituciones educativas privadas en ciudades de la costa peruana ha elevado el empleo de los educadores, representando el 28% (171,200) con respeto a docentes nombrados en el Estado. La oferta de empleo de educadores para escuelas privadas muestra el modelo económico que experimenta nuestro país; El Estado renuncia progresivamente a proporcionar educación de calidad a la población, se incentiva que sean inversionistas privados quienes se encarguen de una responsabilidad que les compete exclusivamente.
La selección y acceso laboral de los educadores muestra conflictos durante la competencia entre profesionales y normalistas egresados de institutos pedagógicos; además de la inclusión de profesionales que no han sido formados como educadores. Los últimos concursos de nombramiento y contratos aún muestran la equivocada percepción de funcionarios del Ministerio de Educación de elaborar pruebas de conocimientos generales en la creencia que esto acredita la calidad profesional de los educadores. En realidad omiten el nivel de experiencia y productividad que posee un educador. Este tipo de concurso ha detenido en parte  el clientelaje político que caracterizaba la obtención de empleo en Educación, bastaba con presentar el carnet partidario para obtener nombramiento sin haber pisado un aula universitaria”

 SALARIO DE LOS EDUCADORES EN PERÚ.
El Estado Peruano a través del Ministerio de Educación, -como órgano intermedio-, asignó el año anterior un Presupuesto Institucional Modificado (PIM) para el sector de s/17,189.300, lo que representa un 3.31% en referencia al Producto Bruto Interno para el año 2012. Este porcentual es el aproximado a lo que se ha venido asignando en los últimos seis años (ver cuadro 01), sin embargo, en el mayor de los casos solo se ejecutan en un aproximado del 85%, lo que en realidad indica que el Presupuesto real en Educación sólo se ejecuta en 2.78%.
La UNESCO sugiere que para mejorar la calidad educativa en el mundo, cada país debe invertir no menos del 6% de su Producto Bruto Interno (PBI). El Perú, -según el informe de la Comisión económica para América Latina (CEPAL)-, es una de las naciones en Latinoamérica con menor presupuesto educativo. En el gráfico 03 puede observarse las líneas de tendencia entre PBI y presupuesto educativo: mientras el PBI indica crecimiento sostenido, en cambio el presupuesto educativo se ha mantenido en 3%. Diferentes gobiernos en Perú se comprometieron a cumplir con el incremento al 6% en el presupuesto general de la república en un plazo mediano, aún no se ha cumplido dicha meta presupuestal.
El exiguo presupuesto también se refleja en el salario de los educadores. A excepción del gobierno de Alejandro Toledo, quien duplicó el sueldo, los demás gobiernos han supeditado los incrementos salariales al condicionamiento de una ley magisterial aprobada recientemente.

El salario de los educadores en Perú es diferenciado, varía según el tipo y nivel  y la jornada laboral, es decir, existe un salario escalonado en el educador de nivel superior en cualquiera de sus formas, así como en educadores de Educación Básica Regular (EBR). Teniendo en cuenta que los educadores de EBR representan el mayor porcentaje laboral en nuestro país (ver cuadro) no existe pirámide salarial, sino una base muy ancha respecto a renumeración privilegiada que perciben un porcentaje muy bajo de educadores.
Bajo la nueva ley de educación los docentes de Educación Básica Regular en el primer nivel y con una jornada laboral de 24 horas perciben un salario promedio de 1,243.39 soles (478.22 USD), la cual va ascendiendo paulatinamente en un promedio de 100, 150 y 200 soles hasta el octavo nivel. Este sueldo resulta reducido comparado con el monto oficial de la canasta básica familiar que es de 2,240.00 soles (861.54 USD). Este salario es percibido por la mayoría de educadores y representa sólo el 55.50% de la canasta básica, muestra la insuficiente capacidad adquisitiva de un educador. Además, si se agrega el gran porcentaje de educadores que laboran en el sector privado y sus salarios representan sólo el 31.25 % de la dicha canasta familiar.
Ante tal situación salarial, las huelgas magisteriales son frecuentes y reiteran una justa demanda por el incremento salarial. Los reclamos de los educadores son tratados por cada gobernante como “conflictos superables” que se aplacan con pequeñas dádivas, -usualmente bonos económicos,- como pago por única vez. Desencadenada una huelga esta es aprovechada por gobernantes y funcionarios de educación para culpar a los educadores por la baja calidad educativa o por las consecuencias de dichas huelgas, donde se perjudica a los discentes.
A fin de atenuar necesidades vitales y obtener una mejor calidad de vida, los educadores optan por nuevas opciones laborales; trabajos a medio tiempo que puedan realizar fuera de sus horarios laborales, perdiendo la función de exclusividad al trabajo docente que se requiere. Esto deja entrever una interrogante ¿En qué momento este educador prepara y planifica sus clases? Es obvio que un educador estará concentrado en solucionar primero sus necesidades básicas y después se abocará a la planificación de lecciones en el aula. Esto constituye un indicador notorio y preciso que nos permite comprender que el desenvolvimiento docente, ya sea en el aula o en la sociedad, dependerá en gran medida de una mejora de sus capacidades adquisitivas.

INDICADORES DEL DESEMPEÑO EN EL AULA
El trabajo profesional de un educador requiere una especialización que no aporta ninguna otra carrera profesional: la formación de habilidades, destrezas y virtudes para educar a sus discentes, logrando a través de ello, fines educativos que involucran factores exógenos y endógenos. El producto más delicado y con potencialidad que forma es el ser humano, su educación no puede quedar en manos de improvisados que consideran la profesión del educador como la última opción laboral.
Esto requiere evaluar la calidad del desempeño docente, de sus cualidades como educador y de los productos que va forjando en las aulas. ¿Cómo se evalúa este desempeño docente? Los resultados se observan en los procesos adecuados de aprendizajes eficientes que realiza en el aula y por sus productos que obtiene después de un proceso prolongado de formación con valores y conocimientos.
Para el primer caso, los procesos adecuados de aprendizajes eficientes se reflejan en el discente como producto de un proceso planificado desde el currículo, en su desarrollo óptimo deberá existir un compromiso dual entre educadores y discentes o sus padres, el compromiso por aprender necesita predisposición y preparación y, sobre todo, contar con condiciones materiales favorables para lograr éxito.
Existen muchos indicadores para evaluar el desempeño docente, una de ellas es el dominio profesional. La característica que evalúa es la información teórica que posee el educador, mide la capacidad informativa y de conocimientos pedagógicos, el nivel académico, y la capacidad resolutiva. Este tipo de indicador no evidencia la experiencia acumulada respecto a las destrezas personales y la estrategia didáctica que posee el educador en su desempeño dentro del aula.
Un indicador de percepción y opinión de los discentes sobre el trabajo del educador en el aula suele ser relativo al momento de aplicarse, requiere de un nuevo modelo educativo, una práctica de libertad participativa y madurez del discente. Sus criterios evaluativos resultarían objetivos si tuvieran un adecuado manejo de los instrumentos de evaluación. Siempre existe riesgo que las evaluaciones de los discentes respecto a los educadores prevalezcan factores subjetivos y surjan condicionamientos de diversa índole.
La autoevaluación proveniente del educador es un indicador de conciencia frente a los resultados de su desempeño en el aula, resulta interesante saber como considera cada uno los avatares del propio desempeño en el aula y sus planes de mejora que debería realizar para superar los obstáculos surgidos. Esta autoevaluación debe indicarnos la situación de la planificación de contenidos a desarrollarse en el aula, requiere que un educador cuente con documentación adecuada y controle los logros obtenidos.
Un indicador que sirve para percibir el desempeño óptimo de un educador es a través de la opinión de autoridades educativas, aunque es notorio en muchos casos se superponen factores ajenos y criterios subjetivos a la hora de aplicar un óptimo criterio evaluativo.
No tenemos cifras exactas para estos indicadores a nivel nacional. El único documento de referencia oficial es el ENEDU 2010, publicado por el Instituto Nacional de Estadística e Investigación (INEI) en convenio con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), para seguimiento del presupuesto público 2010. Este documento presenta una muestra de 5,457 instituciones educativas y 13,189 fue el número de educadores participantes de inicial, primer y segundo año de EBR, representando el 4% respecto al número total de educadores de dicho año. La estadística no incluye los departamentos de Tumbes, Lambayeque, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, por lo que sus resultados podrían variar significativamente.
De acuerdo a los resultados de ENEDU 2010, se percibe un incremento de grados académicos de alto nivel entre los educadores hasta el año 2010. Es necesario tener en cuenta que el proceso del perfeccionamiento para estudio de maestría y doctorado son cubiertos por los mismos educadores, -salvo el caso excepcional de la Región Callao-, los gastos que demanda este tipo de perfeccionamiento son muy altos respecto a la escala salarial de los educadores.
Observando estos resultados es necesario preguntarse como logran los educadores con exiguos salarios obtener grados académicos que sólo se reconoce con un pago aproximado de 46.15 $USD y que la nueva ley magisterial ya no reconoce como bonificación.
Para mejor idea del desempeño de los educadores de inicial, primer y segundo grado de EBR, ENEDU 2010 muestra un análisis de indicadores de acompañamiento pedagógico en el marco del Programa Estratégico Logros de Aprendizaje (PELA). El concepto de “acompañamiento pedagógico” es definido como: “brindar retroalimentación y soporte técnico, promueve su reflexión continua y la mejora permanente de sus desempeños, construyendo vínculos afectivos de cooperación mutua, apoyo solidario y estableciendo relaciones amistosas, de respeto y confianza entre acompañante y acompañado”. Esta definición indica que los aspectos pedagógicos tratados durante el acompañamiento han sido: Programación curricular, Clima en el aula, estrategias de enseñanza–aprendizaje de Comunicación, estrategias de enseñanza–aprendizaje de Matemática.

6 Principios de concepto de aprendizaje conectado

Durante más de un siglo, los educadores se han esforzado en personalizar la educación de los alumnos. El Aprendizaje Conectado aprovecha los avances de la era digital para hacer ese sueño una realidad, es decir, conectar intereses académicos, estudiantes, habilidades de orden superior y armonizarlas con las exigencias de la nueva economía. Los seis principios descritos a continuación, definen un paradgma que permite a los jóvenes desarrollar una experiencia de aprendizaje social, participativo, y de interés relevante impulsado por las oportunidades de nuestro tiempo.
1. El poder de los intereses
 El interés es el catalizador para ganar conocimiento y experiencia. Diferentes investigaciones han demostrado en repetidas ocasiones que cuando el tema es personalmente interesante y relevante, los alumnos obtienen resultados y rendimientos escolares de orden superior. El aprendizaje conectado hace énfasis en los intereses y pasiones que se desarrollan alrededor de un contexto social considerándolos elementos esenciales.
2. Enfocado en la Producción
 Los premios en el aprendizaje conectado vienen de la producción activa, de crear, experimentar y diseñar; promoviendo habilidades y predisponiendo el aprendizaje permanente, de tal manera que se generan contribuciones significativas a la rápida evolución del trabajo y de las condiciones sociales del mundo de hoy.
3. Cultura de Pares
 En el aprendizaje conectado, se desarrolla una ecología social significativa y rica en conocimientos de continua participación, de libre expresión y reconocimiento. En sus intercambios cotidianos con sus compañeros y amigos, los jóvenes contribuyen de manera fluída, comparten unos con otros y se retroalimentan. Tomando en cuenta la característcas de los medios sociales en Internet, la cultura de pares puede producir aprendizajes atractivos y de gran alcance.
4. Propósito compartido
 Hoy en día los medios sociales en Internet y las comunidades basadas en la web, ofrecen oportunidades sin precedentes para adultos, profesores, padres y alumnos por las casi ilimitadas posibilidades para compartir intereses y contribuir con un objetivo común. En este sentido, el potencial del aprendizaje intergeneracional puede verse altamente potenciado si se enfoca en objetivos comunes.
5. Orientación académica
 El aprendizaje conectado reconoce la importancia del éxito académico para el crecimiento intelectual así como para alcanzar oportunidades de carácter económico y político. Cuando los estudios académicos y las instituciones se conectan a la cultura de pares de los jóvenes, la comunidad y sus intereses se ven impulsadas por estudiantes que toman conciencia de su verdadero potencial.
6. Abiertamente-Interconectados
 Los ambientes de aprendizaje conectados vinculan el aprendizaje en la escuela, el hogar y la comunidad, en vista que los alumnos obtienen más y mejores logros cuando su aprendizaje es reforzado y apoyado por medio de múltiples escenarios. Las plataformas en línea pueden hacer que los abundantes recursos de aprendizaje que circulan en la red, sean accesibles y visibles en casi todos los ámbitos donde se desenvuelve el alumno.

lunes, 29 de diciembre de 2014

El futuro de nuestra educación.

Somos un país en crecimiento económico, rico en biodiversidad y diversidad cultural, habitado por gente tenaz, perseverante y creativa. Tenemos el potencial humano necesario para afrontar sus desafíos históricos y lograr un desarrollo sostenible redistribuyendo equitativamente la riqueza, fortalecer la democracia y el ejercicio pleno de la ciudadanía, superando exclusiones y desigualdades, así como para construir un Estado eficiente y transparente al servicio de todos.

Para desarrollar este potencial necesitamos formar personas capaces de enfrentar las adversidades y retos en los diversos contextos de nuestro territorio y sobretodo en una sociedad del conocimiento en continuo cambio. Esta formación tiene que darse a lo largo de la vida, convirtiendo la etapa escolar en una oportunidad para desarrollar ese potencial a sus más altos niveles.

El Ministerio de Educación trabaja para que el sistema escolar se oriente en esa dirección, colocando los aprendizajes al centro de su preocupación, dotando a las escuelas de material educativo de calidad, pertinente a la diversidad cultural y lingüística, involucrando a los padres de familia como socios principales, priorizando las necesidades de las escuelas más pobres, y desarrollando en docentes y directores las competencias requeridas.

La nueva política curricular busca consolidar un camino, iniciado hace varias décadas, para dejar atrás una enseñanza memorística y repetitiva. Se propone avanzar al logro de ocho aprendizajes fundame

Los niños, adolescentes y jóvenes peruanos necesitan aprender a lo largo de su educación básica las competencias necesarias para crecer como personas, desarrollarse a sí mismos y desenvolverse bien en el complejo mundo de hoy, así como para alcanzar las metas que se propongan como personas y como país.

Saber moverse en los distintos escenarios que ofrece el país y afrontar los desafíos que el siglo XXI plantea a su vida personal, social, ciudadana, laboral e intelectual, exige a las actuales generaciones lograr cuando menos ocho aprendizajes fundamentales.

En cualquier ámbito en que se desenvuelvan, las generaciones de hoy requieren aprender a actuar e interactuar con otros demostrando autoestima y autonomía, a favor del propio bienestar físico y emocional. Además, necesitan aprovechar las oportunidades demostrando emprendimiento; así como cuidar su cuerpo a través del ejercicio físico y adecuadas prácticas de salud y nutrición a lo largo de la vida.

También deben ejercer de manera plena su ciudadanía, mostrando que saben convivir, participar, deliberar y actuar con responsabilidad por el bien común. Todo ello reforzado por competencias que les ayude a comprender su presente desde una mirada histórica, espacial y ambiental, así como económica.

Asimismo, tienen que aprender a comunicarse eficazmente a través de distintos lenguajes, una competencia indispensable para su desarrollo personal y la convivencia social. No es menos importante que logren expresarse artísticamente

A cualquier edad, el aprendizaje es un cambio relativamente permanente en el comportamiento, el pensamiento o los afectos de toda persona, a consecuencia de la experiencia y de su interacción consciente con el entorno en que vive o con otras personas. Desde la infancia hasta la madurez, tenemos la aptitud de registrar, analizar, razonar y valorar nuestras experiencias, convirtiendo nuestras percepciones y deducciones en conocimiento.

Niños, adolescentes, jóvenes y adultos aprendemos siempre de ese modo y lo hacemos a partir de nuestras propias posibilidades, de los saberes que hemos cosechado previamente en nuestra experiencia del mundo y de nuestras emociones. Nuestra identidad y nuestra cosecha representan los filtros a través de los cuales seleccionamos, valoramos e incorporamos cada experiencia, convirtiéndola en aprendizaje.

Estos filtros que nos permiten seleccionar nuestras experiencias y traducirlas en conocimiento, son distintos a cada edad y también en cada sociedad, cultura y época. Es natural que las personas varíen su forma de ver y valorar las cosas según el contexto en el que se encuentren o según el tiempo y el lugar en que hayan nacido. Es la razón porque dos personas pueden tener apreciaciones distintas sobre los mismos hechos y obtener aprendizajes diferentes de la misma experiencia.

Nuestra propia trayectoria y personalidad, nuestros afectos y preferencias, son también filtros importantes, que influyen en nuestra manera de razonar y valorar nuestras expectativas.

En edades tempranas, el aprendizaje depende esencialmente de la experiencia directa y sensorial de los niños con sus entornos, los objetos y las personas, una vivencia siempre filtrada y traducida desde la particular forma de ver el mundo de cada uno, en el contexto de su cultura y las influencias de su medio.

No obstante, no todos los niños perciben, registran y se relacionan con sus experiencias de la misma manera, pues los seres humanos venimos al mundo con sensibilidades distintas respecto de los diversos estímulos de la realidad. Algunos tienen mayor receptividad a estímulos sociales y se activan mentalmente con mayor rapidez en la interacción con otras personas. A otros le ocurre lo mismo con estímulos sonoros, otros con la palabra, otros con su propia emocionalidad y estados de conciencia, otros con el movimiento del cuerpo, otros en interacción con formas, espacios y relaciones. Así es de variada la inteligencia humana.

Así, la educación inicial debe ofrecer a los niños oportunidades de aprendizaje sumamente variadas y de carácter multisensorial, que aprovechen su curiosidad natural y su afán investigador, permitiéndole a la vez aprender desde su propio estilo, desde sus propias posibilidades de producir conocimiento sobre el mundo y de generar habilidades para moverse en él.

A partir de los seis años, los niños pueden representar mejor la realidad y por lo tanto están en condiciones de intermediar su relación con ella a través de abstracciones. No obstante, la experiencia directa va a seguir siendo un factor de gran importancia para ampliar las posibilidades de volver más significativo un determinado aprendizaje.

En este periodo de la vida, los niños ya han definido un estilo de aprendizaje y su preferencia por determinado tipo de estímulos y experiencias que se hace más notoria. Siendo que el estilo tradicional de la enseñanza escolar privilegia la oralidad, la escritura y el sedentarismo, no tomar en cuenta la diversidad de formas de conocer y aprender supone favorecer las posibilidades de algunos y perjudicar la de otros. Los estilos que no implican el uso del razonamiento lógico y la palabra suponen una inteligencia distinta, no disminuida, y necesitan también oportunidades de aprendizaje pertinentes a sus propios códigos y fortalezas.

Durante este periodo, la curiosidad sigue siendo una característica básica, tanto como la necesidad de comunicarse, de interactuar y de entrar en acción. Las actividades pedagógicas que sepan aprovechar esta forma de relacionarse con el mundo pueden despertar en los niños interés y compromiso con sus desafíos de aprendizaje.

Hacia el fin de la primaria e inicios de la secundaria, la capacidad de pensar de los estudiantes ha madurado significativamente, lo que se empieza a notar en la manera como atienden, reconocen, codifican y almacenan la información en su memoria, para recuperarla después. A esta edad están en mejores condiciones de reflexionar objetivamente sobre esas operaciones mentales y de identificar la mejor forma de utilizarlas conscientemente para lograr una meta de aprendizaje.

De este modo, pueden elegir la estrategia más útil en cada caso para dirigir sus esfuerzos, supervisar su proceso y autorregular su actividad intelectual. Es la experiencia previa de aprendizaje la que le permite evaluar las estrategias empleadas y seleccionarla con más acierto.

Los adolescentes pueden reconocer mejor sus saberes previos y diferenciarlos de los nuevos conocimientos o habilidades que le proponen aprender y formarse una opinión sobre lo que está aprendiendo. Esto es lo que les permitiría aprender a aprender, formarse como personas que saben lo que saben, cómo lo saben y el valor que tiene ese saber.

Un medio importante que aporta mucho al aprendizaje escolar a cualquier edad son los materiales educativos, los cuales pueden ser definidos como recursos o herramientas pedagógicas cuyo propósito es facilitar el proceso de enseñar y aprender. Bien utilizados, complementan y fortalecen la práctica del docente, facilitando la implementación del currículo, dentro de un enfoque pedagógico que otorga protagonismo al estudiante en su proceso formativo y exige de él una mente permanentemente activa, reflexiva y crítica.

Estos recursos pueden ser materiales impresos, concretos, audiovisuales, tecnológicos o digitales. Si ayudan en el aprendizaje es porque motivan el interés de los estudiantes, los orientan y les sirven de apoyo en su proceso de descubrimiento, reflexión y elaboración autónoma de ideas, sea que los utilicen solos o en interacción colaborativa con otros estudiantes.

Un objeto cualquiera puede convertirse en material educativo si cumple un objetivo o función pedagógica, aun cuando no haya sido diseñado específicamente para tal fin. Algunos sirven de apoyo al desarrollo de competencias a lo largo del tiempo, como los textos escolares, los cuadernos de trabajo, las bibliotecas escolares, los materiales de psicomotricidad, etc. Otros facilitan el desarrollo de capacidades específicas, de logro más inmediato, como las letras móviles, ábacos, bloques lógicos, geoplanos, maquetas de ciencias, etc.

Hay materiales educativos que contribuyen a generar oportunidades para nuevo aprendizaje.

Los espacios donde pueden lograrse aprendizajes valiosos de toda índole, tanto en la infancia como en la adolescencia y juventud o en la vida adulta, no son sólo los delimitados por las cuatro paredes del aula y de la escuela. Todas las experiencias de vida de los estudiantes, sean fuera o dentro de la escuela, al interior de las actividades familiares, sociales, productivas o culturales típicas de la localidad, pueden ser una fuente importante de aprendizajes si es que se vuelven objeto de reflexión y análisis, motivando la generación de conocimientos nuevos.

A toda edad los estudiantes se mueven en distintos escenarios y afrontan variadas situaciones que suponen dilemas o desafíos, los cuales necesitan entender y responder apelando a todo lo que saben y a los medios que tienen disponibles. Además, se proponen objetivos de diversa naturaleza, sea que se trate de conseguir prestado el juguete de su amigo, de evitar que sus hermanos pequeños se hagan daño cuando están solos, de preparar alimentos en casa en ausencia de la madre o de hacer las compras del mercado sin olvidar nada y regresar con el vuelto exacto.

En estas u otras situaciones, de acuerdo a su edad y a su grado de maduración, no sólo registran valiosa información sobre su familia o su localidad, sino que ponen en juego diversas habilidades y aplican conocimientos aprendidos en otros contextos para ensayar soluciones.

Estas experiencias, aprovechadas pedagógicamente, pueden propiciar aprendizajes diversos y pertinentes.

Por qué es mejor leer un libro de papel que uno electrónico antes de dormir

Si eres de los que se acurrucan en la cama con un libro electrónico para una buena sesión de lectura antes de dormir, podrías estár dañando tu patrón de sueño y en consecuencia tu salud. Si puedes, mejor agarra un libro tradicional, aunque te parezca un rollo eso de pasar hojas… Esa es la advertencia que acaba de hacer un equipo de investigación de la escuela médica de Harvard, en Estados Unidos.
Encontraron que las personas que utilizan libros electrónicos con luz integrada o retroiluminados tardan más en dormir, lo cual deriva en una peor calidad del sueño durante la noche y en un mayor cansancio por la mañana. El hallazgo no sólo se aplica en el caso de los libros electrónicos sino también en computadoras, tabletas y celulares, que producen una luz similar. La clave está en lo que se denomina “luz azul”, el tono con el que percibimos la longitud de onda de la iluminación de los dispositivos electrónicos y las pantallas LED.
Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista especializadaProceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). El problema de la “luz azul” Según expertos, la gente debería minimizar la exposición a esta luz durante las horas antes de acostarse. Nuestros cuerpos están sintonizados con el ritmo del día y la noche mediante un reloj interno que se guía por el ciclo de luz y oscuridad del planeta. Pero la luz azul puede desorientar ese reloj: su presencia hacia el final de la tarde puede desacelerar o interrumpir el proceso de producción de melatonina, una hormona que responde a los cambios en la iluminación ambiental. Los niveles de melatonina varían mucho a lo largo del día. Cuando el cuerpo libera melatonina, hacia la noche, uno empieza a sentir ganas de dormir. Los niveles de melatonina también actúan como un despertador natural, que es lo que nos desorienta cuando viajamos entre diferente zonas horarias y nos provoca el jetlag. Si los niveles de melatonina son bajos cuando nos acostamos, aún cuando estémos muy cansados será imposible dormir. Lea también: cinco claves para usar la luz a nuestro favor y dormir mejor La investigación Para la investigación del equipo de Harvard, 12 personas estuvieron dos semanas encerradas en un laboratorio de estudio de sueño. Pasaron cinco días leyendo libros de bolsillo y cinco días leyendo en una tableta iPad. Los investigadores hicieron análisis de sangre regulares que demostraron una reducción en la producción de melatonina cuando leían libros electrónicos. También les tomaba más tiempo quedarse dormidos, dormían menos profundamente y estaban más cansados a la mañana siguiente. Lea también: la “arrogancia” de ignorar la necesidad de dormir Luz “directa al ojo” Según la doctora Revell deberíamos minimizar el uso de estos dispositivos al atardecer, particularmente los adolescentes, que usan sus celulares y tabletas hasta tarde. El problema según Charles Czeisler, que lideró el equipo de investigación, es que “la luz emitida por la mayoría de los dispositivos de lectura electrónica brilla directamente hacia los ojos del lector, mientras que desde el libro impreso o el Kindle original, el lector sólo está expuesto a la luz reflejada de las páginas del libro”. Según dijo Czeisler a la BBC, la perturbación del sueño tiene efectos sobre la salud. “Se ha demostrado que la deficiencia de sueño aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, enfermedades metabólicas como la obesidad y la diabetes, y de cáncer”, dijo. “Por eso nos preocupa la supresión de melatonina que observamos entre los participantes de este estudio, cuando leían en dispositivos electrónicos con luz integrada”, concluyó. La doctora Victoria Revell, que no participó en el estudio pero investiga el impacto de la luz sobre el cuerpo en la universidad inglesa de Surrey, le dijo a la BBC que se trata de unos resultados muy interesantes. “Deberíamos recomendarle a la gente que minimice el uso de estos dispositivos al atardecer, particularmente a los adolescentes, que usan sus celulares y tabletas hasta tarde”, dijo. Los adolescentes tienen naturalmente un reloj biológico “retrasado”, lo que hace que les cueste levantarse por la mañana y se duerman tarde por la noche. Según Revell, la práctica de leer con dispositivos con luz integrada antes de acostarse podría estar retrasando ese reloj mucho más. El investigador Czeisler concuerda en que hay una “preocupación especial” por los adolescentes, que ya tienen privación del sueño por tener que levantarse temprano para ir al colegio.

domingo, 28 de diciembre de 2014

MINEDU prohíbe a los colegios denominarse «Centros pre-universitarios

El Ministerio de Educación - MINEDU, indicó que la educación básica no debe concentrarse solo en aprobar un examen de admisión, sino en impartir una formación integral: El Ministerio de Educación prohibió el uso, difusión y publicidad de la denominación "centros preuniversitarios" para todos los colegios públicos y privados, bajo responsabilidad de los directores, según se establece en las Normas y Orientaciones para el Desarrollo del Año Escolar 2015 en la Educación Básica.
Dichas disposiciones prohíben además, bajo responsabilidad del director, caracterizar u ofertar la formación impartida como "preuniversitaria". Esta restricción del Ministerio de Educación responde a que el enfoque de "enseñanza preuniversitaria" que ciertos colegios adoptan y publicitan se contrapone con el modelo pedagógico que actualmente se aplica en la educación básica regular.
Se considera que la educación básica no debe concentrarse solo en aprobar un examen de admisión a la universidad y alcanzar una vacante, sino en impartir una formación integral que, junto con los conocimientos académicos, contemple la cultura general y los valores morales. En el ámbito de educación secundaria, las Normas y Orientaciones 2015 del Ministerio de Educación establecen la ampliación de la jornada laboral de los profesores en dos horas (de 24 a 26 horas semanales), lo que implica permanencia en la institución educativa.

Ranking Mejores Universidades del Perú

La revista América Economía ha elaborado un ranking donde de muestra una lista de las 14 mejores universidades del Perú en el 2014, el cual es liderado, una vez más, por la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP): La publicación de este ranking tomó en cuenta diveros factores, como la percepción de calidad docente (25%), investigación (25%), internacionalización (10%), empleabilidad (15%), acreditación (10%), infraestructura (5%), selectividad académica (5%) e inclusión (5%).
Es así que la Católica continúa liderando este ranking, seguida por la Universidad Cayetano Heredia, la cual mantiene el segundo lugar obtenido en el ranking del 2012 y 2013. Por su parte, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos es la única institución estatal que aparece en este listado. Tal como años anteriores, la Decana de América continúa en el tercer puesto. En tanto, la Universidad del Pacifico escaló un puesto, pasando del quinto al cuarto lugar, superando a la Universidad de Lima que ahora la quinta casilla, mientras que la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) sigue escalando posiciones. En el 2012, ocupaba el decimotercer puesto, un año después llegó al noveno lugar y hoy figura en el puesto 6. Similar situación presenta la universidad de Piura, la cual escaló tres posiciones en referencia al año pasado, llegando al séptimo lugar. Cabe anotar que 10 puestos subió la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL), pasando del decimoctavo lugar al octavo. ESAN también subió varios puestos a diferencia del año pasado en el que ocupó el puesto 16, ahora figura en el noveno lugar. Completa el top 10 la Universidad Ricardo Palma, que en el 2013 ocupó el decimoquinto lugar. Las otras cuatro universidades que forman parte del ranking son la Universidad Científica del Sur (48° en el 2013), la Universidad Ruiz de Montoya (50° en el 2013), la Universidad Continental y la Universidad Privada del Norte (UPN).
Ranking de las mejores universidades del Perú 2014 1:
1. Universidad Católica del Perú
2. Universidad Cayetano Heredia
3. Universidad Nacional Mayor de San Marcos
4. Universidad del Pacífico
5. Universidad de Lima
6. Universidad de Piura
7. Universidad San Ignacio de Loyola
8. ESAN
9. Universidad Ricardo Palma
10. Universidad Científica del Sur
11. Universidad Ruiz de Montoya
12. Universidad Continental
13. Universidad Privada del Norte

La industria de los profesores particulares

Me ha asombrado la gran cantidad de padres de familia que conozco de varios colegios particulares me comentan que el colegio al que asisten sus hijos plantea tales niveles de exigencia, tanto en idioma extranjero como en matemáticas y otras áreas, que la única manera de sus hijos para sobrevivir en el colegio y evitar los desaprobados (y eventual repitencia o expulsión del colegio) es contar con profesores particulares. Hay un ejército de profesores particulares de inglés, matemáticas, etc., que llenan las jornadas pos escolares, agotan a los alumnos y desgastan económica y emocionalmente a los propios padres, para quienes la vida escolar de sus hijos es un factor de constante estrés. En buena cuenta, deben hacer en casa por su cuenta aquello para lo cual han matriculado a sus hijos en los colegios. ¿Tiene sentido todo eso? Por otro lado, ¿sorprende que los alumnos ?odien? ir a su colegio? En buena cuenta los colegios, y en muchos casos cada profesor que se encuentra con los padres para hacerles recomendaciones para que sus hijos mejoren en el colegio, se han convertido en brokers de profesores, psicólogos y centros de atención especial (sin contar los que recomiendan medicación para anestesiar a los niños inquietos). Por si fuera poco, cada uno tiene sus profesores o terapeutas recomendados, con lo que se concreta una especie de subsistema escolar particular que sustituye las falencias del original. Me sorprende, además, que tantos padres sientan que no se puede hacer nada al respecto.

sábado, 27 de diciembre de 2014

Rumbo a la nota más alta

A un año  de gestión como ministro, la última edición de CADE me dio la oportunidad de reflexionar acerca de la magnitud de los retos que enfrenta la educación. Nuestro sistema educativo está lejos de ser lo que nuestros hijos se merecen. Hay escuelas públicas y privadas excelentes. Pero no son la norma.
El reto es muy grande. Los  salarios docentes están por debajo del promedio de la región; el rol de los directores  como líderes y gestores de sus escuelas está descuidado; muchas escuelas no cuentan con el apoyo del personal administrativo necesario para operar como las complejas instituciones que son. La brecha de infraestructura, mobiliario y equipamiento es inmensa: S/.63.000 millones que hacen palidecer  los nada desdeñables S/.7.000 millones invertidos en los dos últimos años.
 Yo plantearía cuatro líneas de acción que requieren un avance sostenido y urgente:
i) revalorizar la carrera de nuestros docentes.
ii) modernizar la gestión, en particular, el rol del director.
iii) mejorar la calidad de los aprendizajes.
iv) cerrar la brecha de infraestructura educativa.
Para lograr la magia de la enseñanza y el aprendizaje en nuestras aulas, necesitamos avanzar en estos frentes simultáneamente. Una maestra inspirada, una directora líder, un estudiante motivado y una ingeniera innovadora son los actores que representan estos cuatro frentes.
Todos hemos tenido alguna maestra que nos ha motivado, que ha contribuido a moldear nuestras ambiciones y nuestro destino. En las manos de nuestros  400.000 maestros está nada más y nada menos que  el futuro de nuestros hijos y, por ende, el futuro del país.
¿Cómo entonces no invertir más en ellos? Afortunadamente, la carrera docente está encaminada en una lógica meritocrática en la que los incrementos salariales y el desarrollo profesional están ligados al desempeño y el mérito.  Hace dos meses se aplicó una prueba de ascenso en la cual participaron 130 mil maestros; 25 mil ascendieron, logrando que sus ingresos se incrementaran 40% en promedio. Esto refleja que los maestros están dispuestos a operar en una carrera meritocrática. Y el próximo verano habrá otra prueba similar. En el 2015 tendremos un concurso de nombramientos y vamos a poner una vara más alta para el ingreso, así como un bono de entrada. Son señales de que la carrera docente es difícil y retadora pero, al mismo tiempo, valorada.
Necesitamis directores con tengán mayores atribuciones y responsabilidades. El director debe ser un gran líder, que inspire y guíe a la escuela, que modernice la gestión y lleve la educación peruana rumbo a la nota más alta. Los estudiantes necesitan que el aula sea una experiencia que lo enganche y lo motive.  Que su profesor tenga la oportunidad de interactuar con otros maestros y con profesores más experimentados, con quienes pueda discutir acerca de sus planes pedagógicos. Este tipo de soporte se está expandiendo,  con el objetivo de llegar a todos los maestros en pocos  años. Los estudiantes necesitan que el colegio no deje de ser parte de su vida a la una de la tarde.  Por ello, el próximo año mil colegios secundarios tendrán una jornada completa, de 10 horas adicionales por semana.
Necesitamos entrar a otra velocidad de cambio. Este gobierno ha establecido un compromiso acelerado de mayor inversión que permitirá alcanzar un  4% del PBI el 2016. Así,  habrá duplicado la inversión en educación respecto del inicio del mandato del presidente Humala. Pero más dinero no garantiza nada. Necesitamos  un cambio de expectativas y de ambiciones, trabajando sostenidamente en estas  líneas de acción concretas. Salimos de la inercia y buscamos la excelencia para los 7,5 millones de alumnos en escuelas públicas y privadas.
La educación en el Perú puede y va a ser excelente, pero requiere el compromiso de la actividad privada, de los políticos apostando por ella como  política de Estado, de los gobiernos regionales comprometidos, de padres involucrados en la educación de sus hijos  y de un Estado trabajando por la educación peruana. Solo así avanzaremos rumbo a la nota más alta. Eso se lo debemos a nuestros niños, niñas y jóvenes del Perú.

viernes, 26 de diciembre de 2014

Escribir a mano es del siglo pasado

Finlandia anuncia que abandona la enseñanza de la caligrafía en los colegios, y la sustituirá, empezando en 2016, por el aprendizaje de la mecanografía y el uso del teclado. La caligrafía se define oficialmente como una habilidad anticuada, cuyo aprendizaje ya no aporta especialmente nada desde un punto de vista práctico al desarrollo de la persona, una habilidad que puede ser más encuadrada dentro de la curiosidad histórica.
El movimiento, sin duda, va a ser calificado por muchos como muy agresivo. ¿Es adecuado que los niños dejen de escribir a mano, en un entorno en el que ya prácticamente solo lo hacen cuando ejercitan dicha habilidad? Un examen detallado de la vida cotidiana de un niño en nuestros días revela claramente que escriben de manera constante en teclados de todo tipo, físicos o virtuales, en ordenadores o en smartphones, pero únicamente recurren a la escritura a mano cuando les es específicamente solicitado… para conseguir que aprendan a escribir a mano.
Con el paso del tiempo, a medida que esos niños se van haciendo mayores, la necesidad de escribir a mano va disminuyendo todavía más. Yo llevo un bolígrafo en mi bolsillo por puro romanticismo y para firmar algo de vez en cuando, pero la realidad es que me paso días y días sin utilizarlo.
En mi paso por la universidad, mi forma de tomar apuntes era muy apreciado por muchos de mis compañeros, porque tendía a apuntar prácticamente todo, con una letra nada bonita, pero razonablemente inteligible. Un paseo por la biblioteca de la universidad me permitía ver mis apuntes fotocopiados y subrayados en todos los colores imaginables. Terminada la universidad, dejé de escribir a mano. Hoy me costaría muchísimo tomar más de unas líneas: cuando lo he intentado, me ha resultado incomodísimo. Para cualquier tarea de escritura que implique un mínimo de creatividad, escribir a mano es completamente implanteable: mi forma de escribir actual recurre tanto a la vuelta atrás, a la sustitución o al replanteamiento de la estructura de lo que quiero expresar, que un modelo en el que cada pensamiento se plasme de manera irreversible en un papel resulta, además de arcaico, directamente absurdo. Si tengo que tomar unas notas en una reunión, lo último en lo que pienso es en utilizar un papel y un lápiz: lo primero que se me ocurre es sacar mi smartphone. En mi labor como profesor, me limito a escribir algunas palabras aisladas en una pizarra en la que añoro un teclado y un ratón, y cada vez que lo hago – por lo general, muy pocas – mis alumnos entienden perfectamente por qué no me gusta hacerlo. Mi visión en este tema es completamente radical: de la misma manera que llevo años abogando por la desaparición total y absoluta del papel y si tuviese una empresa apostaría por prohibirlo, vería bien que la escritura a mano pasase a ser considerada algo del pasado.
Escribir a mano resulta decididamente poco práctico y cada vez menos habitual, firmar es un método de autenticación débil y absurdo, y el bolígrafo o la pluma son cada vez más un artefacto menos práctico. ¿Estamos preparados como sociedad para anunciar el fin de la escritura a mano, o surgirán legiones de nostálgicos planteándose cuestiones como el romanticismo, la preservación de un bien cultural – como si la escritura cuneiforme fuese una habilidad remotamente interesante para alguien – o como el qué vamos a hacer es ese cada vez más improbable y absurdo momento en el que no tengamos acceso a un smartphone o a un teclado?

miércoles, 24 de diciembre de 2014

Que son las tecnicas de estudio

El fracaso en el estudio, en gran parte, es debido a que el alumno no sabe estudiar, ni le han enseñado.
El aprendizaje depende del estudio y no sólo es importante cuánto se estudia, también cómo se estudia. El punto crucial es aprender a aprender, y se aprende gracias a estrategias y técnicas, es decir un procedimiento para favorecer la tarea del estudio.
Las técnicas de estudio son un conjunto de herramientas, fundamentalmente lógicas, que ayudan a mejorar el rendimiento y facilitan el proceso de memorización y estudio.
Las técnicas y hábitos de estudio están basados y diseñados para corregir y mejorar el estudio.
Hoy en día los estudiantes tienen la opción de mejorar su rendimiento con normas, trucos, técnicas o recetas de estudio que puedan optimizar claramente los resultados y ayuden a comprender mejor los contenidos que se les ofrece.
Cualquier trabajador en su actividad diaria utiliza una serie de hábitos y técnicas que le facilitan conseguir sus objetivos y mejorar sus resultados. Tú eres un trabajador con una meta: aprender. Para ello asistes a clase, atiendes a los profesores, realizas ejercicios y estudias.
Como cualquier trabajador, es necesario que conozcas y domines las técnicas propias de tu profesión de estudiante, las llamadas técnicas de estudio, que facilitarán tu labor economizando esfuerzo, tiempo y mejorando, en definitiva, tu rendimiento.
Es de gran importancia tener una buena planificación de los estudios, así como estudiar de forma estructurada para así, conseguir mejores resultados en los estudios.
Practicar una correcta metodología de estudio es una de las claves para conseguir el éxito en el estudio de cualquier materia, por muy difícil que parezca. Aparte de conseguir un tiempo de estudio efectivo y constante, supone sacar el mayor partido al tiempo del que se dispone para rentabilizar esfuerzos y aumentar tu seguridad.
El método que utilicemos a la hora de estudiar tiene una importancia decisiva, ya que los contenidos a estudiar, por sí solo no provocan un estudio eficaz, a no ser que apliquemos un buen método que nos facilite su comprensión, asimilación y puesta en práctica.
El método que aquí os propongo consta de siete fases:
1. Prelectura: es ese primer vistazo que se le da a un tema para hacernos    una primera idea del texto o tema.
2. Lectura comprensiva: consiste en leer de forma detallada el texto, párrafo a párrafo, anotando al margen la idea principal de cada uno de ellos.
3. Notas al margen: son las palabras que escribimos a los lados del texto, expresando las ideas principales de cada párrafo con nuestras propias palabras.
4. Subrayado: consiste en marcar aquellas palabras que contengan la idea principal y las secundarias del texto.
5. Esquema: organiza todas las ideas identificadas en la fase anterior, de forma ordenada y estructurada.
6. Resumen: es una síntesis de lo leído y subrayado, con nuestras propias palabras.
7. Memorización: consiste en mantener en nuestra memoria lo que estamos aprendiendo, relacionándolo con nuestros conocimientos previos.

martes, 23 de diciembre de 2014

Acoso escolar

Hace un par de semanas cuando me dirigia a la UGEL 06  me encontre con una amiga y profesora de secundaria de la I.E. INEI 46 de Vitarte, ella me pasó un libro relativo al acoso escolar o bullying. Es muy fácil de leer, tiene pocas páginas, y creo que refleja de forma clara en qué consisten este tipo de procesos, cómo se vive por la parte de la víctima, del agresor y del entorno de escolar y de amigos. Se trata de “Eskoria”, de Alberto Gómez Cerdá, y recomiendo su lectura, sobre todo, a padres y profesores de adolescentes y, por supuesto, a los propios adolescentes. Hoy he decidido escribir sobre este tema, que me parece de vital importancia en la sociedad actual, donde las cifras apuntan a que el acoso escolar es una práctica cada vez más extendida, y que más niños sufren en la soledad.
Tú no eres culpable de nada, Tienes derecho a ser diferente, Tú no tienes que hacer frente a esta situación solo, Tienes que ser valiente y enfrentarte de una vez a la situación. Si alguien te está haciendo daño y estás sufriendo, acude a un adulto: tus padres, y también tus profesores. Si no te atreves, empieza por contárselo a alguien de tu edad, alguien que pueda entenderte y ayudarte. Habla con quien ha visto las agresiones, para que te apoye. Haz que al adulto le quede claro que esa situación te afecta profundamente. Si sientes que no puedes hablar, que no te atreves, escríbelo y envíalo a alguien en quien confíes. Pero, sobre todo, tienes que saber que no estás solo, que siempre hay una salida, y que debes seguir luchando. No dejes que ganen, porque de esa forma, todos perdemos.
A los agresores les  recomendaria que No hagan a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti. A nadie le gusta que le tiren cosas o se rían de él. No lo hagas. El hecho de que alguien no te caiga bien no implica que utilices la violencia de ningún tipo. No excluyas a nadie de tus actividades, trata de entender cómo te sentirás tú si te excluyeran. No digas mentiras sobre otros, no difundas rumores. Si tienes conflictos, resuélvelos sin violencia. También es acoso herir con palabras, con insultos, haciendo que se sienta solo y mal. Aunque creas que eres el líder, ¿tienes amigos que te quieren? ¿O quizás sólo te temen? Si utilizas la violencia, ella te acabará utilizando a ti. La violencia no para: nunca será suficiente, engendrará más y más violencia, y puede que termine arruinando tu vida y tu futuro.  
A los que observan actos de acoso escolar deben de actúar. Si consientes el maltrato, eres cómplice de los maltratadores. Si acudes a un adulto no eres un chismoso, sino alguien que hace lo correcto. No son bromas. En las bromas nos reímos todos con todos. No todos de uno. Haz que la víctima se lo cuente a un adulto. Ve con él si es necesario. Si no se atreve, pide ayuda en su nombre. No te justifiques, no son “cosas entre nosotros”. Recuerda que con el silencio y la pasividad estás alentando a los agresores. La unión hace la fuerza. Involucra a amigos, profesores, padres…. Ayuda al que lo necesite, y cuando tú necesites ayuda, alguien te ayudará.
Estos consejos deberían estar presentes en las paredes de las aulas de todos los colegios.

¿Porque los niños van a las escuelas?

Esta es una pregunta que en primera instancia, tiene una respuesta inmediata, claro, de mi parte y como adulto puedo responder diciendo que los niños van a la escuela porque deben o necesitan aprender ¿Aprender qué? También puedo responder diciendo que los niños requieren socializar, interactuar y aprender a convivir entre sus pares y con los adultos ¿Convivir de qué manera? O porque en la vida de toda persona requiere de la experiencia de vida y la escuela es una oportunidad controlada que durante catorce años le ofrece esa experiencia de vida ¿Qué tipo de experiencia? Si le preguntamos a nuestros estudiantes ¿por que vas a la escuela? cuál será o serán sus respuestas. Muchos de nuestros estudiantes no manejan una respuesta elaborada, sino una respuesta estereotipada como: "venimos a la escuela porque debemos aprender". Los estudiantes que son adolescentes responden menos estereotipadamente, diciendo: "no sé por qué vengo a la escuela" o "voy a la escuela porque me han mandado mis padres" y algunos lo proyectarán al futuro diciendo "voy a la escuela por que quiero ser un profesional o porque deseo estudiar en la universidad". Es muy probable que ellos, los estudiantes, si tengan una razón clara, válida o no, del por qué van a la escuela, pero lo que es muy difícil de comprobar, es si esas razones son las mismas que tenemos nosotros los adultos para convocarlos o para obligarlos a asistir.
Me animaría a afirmar que no son las mismas razones. ¿Qué le ofrecemos a nuestros niños y adolescentes en las escuelas? Lo más común, es que cuando ellos llegan a la escuela queden sometidos a una estructura, a un sistema de normas, de contenidos y de intenciones pedagógicas que son impuestas "por su bien" y que muchas veces, ni siquiera son inducidos, motivados a asumir dichas estructuras. Con notables excepciones, existen propuestas pedagógicas que estableciendo un criterio de respeto a la persona del estudiante, lo van induciendo y van generando mecanismos de participación e integración para que las intenciones pedagógicas nazcan de un consenso o de un involucramiento y de una identificación progresiva.  Caso contrario, nuestros estudiantes quedan únicamente sometidos a voluntades ajenas a sus expectativas, intereses y características propias de su edad. Qué delicado resulta, asumir la responsabilidad de tantas vidas, de tantas expectativas con la finalidad de formarlos y de educarlos. Considero que no es una opinión tan desatinada, si propongo propiciar y ampliar el diálogo natural y democrático con nuestros estudiantes y construir propósitos e intenciones pedagógicas en un marco de entendimiento. La convivencia, los aprendizajes, las normas y las expectativas quedarían explícitas producto de esta construcción con sentido amplio. En breve plazo, seguro obtendríamos respuestas coherentes en maestros y estudiantes al encontrar razones válidas, conscientes y plenamente identificadas para responder ¿Por qué van nuestros estudiantes a la escuela?

La importancia de la familia en la formación de la persona humana

La humanización de  la familia fortalece la humanización del trabajo. Los valores que denominamos humanos son los únicos que en su uso frecuente, que en su apropiación voluntaria, nos hace cada día más humanos, nos hace más personas humanas.
Conversando con mi colega y gran psicologa Marcia Orosco sobre la familia y su importancia en la sociedad,  me respondió a estas cinco preguntas que le hice.

¿Son nuestras familias un espacio en donde se vive y se aprenden los valores humanos a lo largo y durante  la convivencia?
Considero que la respuesta es obvia. Si. Eso nos hace a cada uno de nosotros que provenimos de una familia  humana y además cristiana, en portadores y defensores de valores humanos. Defensa, difusión y vivencia de valores humanos en todos y cada uno de los ámbitos en donde nos desenvolvemos y en donde ejercemos nuestros roles sociales. Lo afirmado anteriormente, coloca a la familia en un rol sumamente importante y además le coloca la gran responsabilidad, y agregaría, en la obligación imperativa, de formar  a sus integrantes en una sólida convicción para la vivencia de valores humanos. En cada decisión que se toma en casa, hacemos uso de un conjunto de valoraciones, en otras palabras, utilizamos como criterio de elección o decisión uno o varios valores.

¿Cuáles son los valores que determinan frecuentemente nuestras decisiones cotidianas?
Cuando los padres o los hijos toman una decisión o hacen una elección, se hace uso de criterios valorativos. En la literatura encontramos valores tales como estéticos, económicos, políticos, religiosos y también humanos  (éticos o universales). Por ejemplo, si como padres decidimos cambiar un trabajo por otro, utilizando como criterio principal el económico, quiere decir que estamos privilegiando el valor económico (mejor sueldo) por encima de otros valores. Naturalmente, el dinero produce efectos de bienestar, pero fundamentalmente, de bienestar material. Todos deseamos estar bien y que nuestra familia esté bien, pero el énfasis, incómodo en esta reflexión, es un énfasis material. Es una elección personal, y no se pretende juzgar a nadie, pero si hacer la reflexión, sobre el uso de loa valores que humanizan y aquellos que cumplen otras finalidades, pero no humanizantes. Ciertamente, podríamos argumentar a favor de una decisión como la mencionada, sin embargo, el ejemplo busca, hacer un alto en lo cotidiano.

¿El dinero es importante?
Claro que lo es. Pero, analicemos nuestros comportamientos. En el ejemplo, debemos también sopesar si pasamos de una situación laboral  injusta, humillante, indignante, inhuma a otra justa, dignificante, humanizante. Vale decir, sino es el dinero lo que determina nuestra decisión, sino que son las ponderaciones valorativas humanas las empleamos para tomar una decisión humanizante. Cuando uno de nuestros hijos, en tiempos de hacer una elección profesional y optar por una carrera, su decisión se orienta por ponderaciones, en donde se emplean criterios valorativos vinculados  a la ubicación social de la profesión, y a la posibilidad de mayor acceso económico que ofrece la carrera, lo que ellos están haciendo, es colocar mayor énfasis en valores vinculados a lo utilitario y económico de una profesión. Mientras por un lado, deseamos formar a nuestras familias en valores humanos y cristianos, por otro lado, nuestras decisiones cotidianas, se sustentan principalmente sobre valores que no son precisamente humanos, sino de otra índole.

¿Cómo podemos decirnos que somos humanos, si los valores que nos definen como tales, son empleados en segunda mano y pocas veces en primer lugar, mientras  que los llamados económicos, utilitarios o estéticos, entre otros, son colocados con ciertos énfasis en nuestras decisiones?
Vivir los valores humanos, sin duda, es una de las tareas más difíciles. No obstante, el uso de valores humanos, son la única reserva que permite que seamos definidos como tales. Todos somos personas, pero no todos somos humanos. Existen personas con muy poca calidad humana y también las hay con mucha calidad humana.

¿Qué distingue una de otras?
Sencillamente el uso de los valores. Solo aquellas  que en su vida, en sus decisiones, en sus criterios, en sus elecciones emplean como criterio principal los valores humanos, serán  de una mayor calidad humana, y aquellos que en sus decisiones emplean muy poco o casi nunca los valores humanos, serán definidos como poco humanos. Siempre la elección es nuestra. Nadie puede decidir sobre nosotros, solo nosotros podemos tomar nuestras propias decisiones, aunque muchas veces sean dolorosas, pero humanas.

El silencio como valor pedagógico

En el aula, solemos pedir a nuestros niños y niñas que "guarden silencio" en variadas circunstancias, en la mayoría de situaciones, es para lograr que nos escuchen, ya sean nuestras explicaciones, nuestras instrucciones o reflexiones, silencio para ser escuchados. En otras, es para lograr un espacio de "tranquilidad",  deseamos que nuestros estudiantes trabajen en silencio, permanezcan en silencio. Es frecuente, entonces,que busquemos el silencio en nuestros estudiantes para lograr un efecto positivo, entiendo, sobre los aprendizajes y en otros casos, para que podamos influir en los comportamientos y actitudes de nuestros niños y adolescentes. Como adultos, en nuestras relaciones interpersonales, es muy poco frecuente que alguien nos pida guardar silencio. Es por el contrario, frecuente, que como  adultos, busquemos el silencio. Que los busquemos por ejemplo, para meditar, para pensar en nuestros asuntos personales. Cuando requerimos tomar una decisión, muchas veces solemos buscar espacios solos, espacios silenciosos para pensar con profundidad, hasta podemos buscar el aislamiento, para muchos, si no obtenemos el silencio necesario, no podemos lograr los resultados esperados en nuestra reflexión, decisión o meditación.
Regresemos al aula. ¿En que momento le enseñamos a nuestros niños y adolescentes a reconocer en el silencio un valor pedagógico que nos puede facilitar un mejor conocimiento sobre nosotros mismos? 
Gardner, señala en su planteamiento de las inteligencia múltiples que existen dos de ellas, que denotan el conocimiento de sí mismo (Inteligencia Intrapersonal) y el conocimiento de los demás (Inteligencia Interpersonal), considero que el silencio, constituye un medio que coadyuva al desarrollo de estas dos inteligencias mencionadas. El silencio para descubrirse y potenciar el conocimiento de uno mismo, el silencio para permitirnos conocer a los demás, escuchándolos, observándolos, reflexionando sobre las actitudes y comportamientos de los demás. Goleman, también habla de las competencias de autoconocimiento, de autoregulación, de empatía, entre otras, en estos casos, el silencio adquiere un valor significativo, puesto que nos permite ahondar en nosotros mismos y en el entendimiento de los demás, He querido encontrar un valor agregado al silencio, más allá de lo que acontece cotidianamente en nuestras aulas como un pedido casi automático  y monótono. Estamos perdiendo la oportunidad de considerarlo como un medio importante para el crecimiento personal de los niños y adolescentes. Ayudémoslos para que a través del silencio, se escuchen a sí mismos y se  descubran, se encuentren con sus ideas, sentimientos y pensamientos, para que también mediante el silencio, escuchen y descubran a los demás. ¿Cómo usas el silencio con tus estudiantes? ¿Qué valor pedagógico tiene en tu acción educativa?

La creatividad se aprende al igual como se aprende a leer


Salgo tan inspirado de la entrevista que le hice a mi coega y psicologa Marcia Orosco, y que explicaré brevemente cómo encontrar nuestro elemento creativo. Porque a ser innovador se aprende igual que a sumar: a cualquier edad y en cualquier circunstancia, con la única condición de tener ganas.
Todo niño es un artista. Porque todo niño cree ciegamente en su propio talento. La razón es que no tienen ningún miedo a equivocarse... Hasta que el sistema les va enseñando poco a poco que el error existe y que deben avergonzarse de él.  Los niños también se equivocan. El único error en un colegio es penalizar el riesgo creativo. 
Los exámenes hacen exactamente eso.  No estoy en contra de los exámenes, pero sí de convertirlos en el centro del sistema educativo y a las notas en su única finalidad. Si no estás preparado para equivocarte, nunca acertarás, sólo copiarás. No serás original. 
¿Se puede medir la inteligencia?
La pregunta no es cuánta inteligencia tienes, sino qué clase de inteligencia tienes. La educación debería ayudarnos a todos a encontrar la nuestra y no limitarse a encauzarnos hacia el mismo tipo de talento. 

¿Cuál es ese tipo de talento?
Nuestro sistema educativo fue concebido para satisfacer las necesidades de la industrialización: talento sólo para ser mano de obra disciplinada con preparación técnica jerarquizada en distintos grados y funcionarios para servir al Estado moderno.  La mano de obra aún es necesaria. ¡Pero la industrialización ya no existe! Estamos en otro modo de producción con otros requerimientos, otras jerarquías. Ya no necesitamos millones de obreros y técnicos con idénticas aptitudes, pero nuestro sistema los sigue formando. Así aumenta el paro.  Pero se nos repite: ¡innovación! La piden los mismos que la penalizan en sus organizaciones, universidades y colegios. Hemos estigmatizado el riesgo y el error y, en cambio, incentivamos la pasividad, el conformismo y la repetición  No hay nada más pasivo que una clase.

¿Es usted profesor, verdad?
Las clases son pasivas porque los incentivos para estar calladito y tomar apuntes que repetirá son mayores que los de arriesgarse a participar y tal vez meter la pata. Así que, tras 14 años de educación en tres niveles que consisten en formarnos para unas fábricas y oficinas que ya no existen, nadie es innovador. 

¿Cuáles son las consecuencias?
Que la mayoría de los ciudadanos malgastan su vida haciendo cosas que no les interesan realmente, pero que creen que deben hacer para ser productivos y aceptados. Sólo una pequeña minoría es feliz con su trabajo, y suelen ser quienes desafiaron la imposición de mediocridad del sistema.  Tipos con suerte... Son quienes se negaron a asumir el gran error anticreativo: creer que sólo unos pocos superdotados tienen talento.  "Sé humilde: acepta que no te tocó". ¡Falso! ¡Todos somos superdotados en algo! Se trata de descubrir en qué. Esa debería ser la principal función de la educación. Hoy, en cambio, está enfocada a clonar estudiantes. Y debería hacer lo contrario: descubrir qué es único en cada uno de ellos. 

¿La creatividad no viene en los genes?  
Es puro método. Se aprende a ser creativo como se aprende a leer. Se puede aprender creatividad incluso después de que el sistema nos la haya hecho desaprender.  Por ejemplo... Soy de Chosica y conozco el instituto donde recibieron clases de música mi amigo Paul y Jorge ¡Dios mío! ¡Ese profesor de música tenía en su clase a mas 50 estudiantes.  Y... Nada. Absolutamente nada. Paul me ha explicado que el tipo les ponía un disco de música clásica y se iba a fumar al pasillo.  A pesar del colegio, fueron genios. A mi hermano Elvis no lo admitieron en el club de canto de su cole porque "desafinaba". A mí, en cambio,  mi madre me matriculó de adolescentes en un taller de guitarra, allí conocí a alguien que había sido un fracaso escolar de ocho añitos. Incapaz de estar sentada oyendo una explicación.  ¿Una niña hiperactiva? Aún no se había inventado eso, pero ya se habían inventado los psicólogos, así que la llevaron a uno. Y era bueno: habló con ella a solas cinco minutos; le dejó la radio puesta y fue a buscar a la madre a la sala de espera; juntos espiaron lo que hacía la niña sola en el despacho y... ¡estaba bailando!  Pensando con los pies. Es lo que le dijo el psicólogo a la madre y así empezó una carrera que llevó a esa niña, Paty, mas adelante a dar clases de coreografía en su popa casa en Chaclacayo. Si hubieran hecho caso a sus notas, hoy sería una frustrada. Sería cualquier cosa, pero mediocre. La educación debe enfocarse a que encontremos nuestro elemento: la zona donde convergen nuestras capacidades y deseos con la realidad. Cuando la alcanzas, la música del universo resuena en ti, una sensación a la que todos estamos llamados.

domingo, 21 de diciembre de 2014

7 consejos para fortalecer la Autoestima en el aula

La autoestima es un ingrediente imprescindible para lograr tener una educación emocional sana y completa. Modela la forma en que las personas se ven a sí mismas, e influye en todas las áreas de la vida, ¿cómo no trabajarla también en nuestras clases? 
Fortaleciendo la autoestima de nuestros estudiantes logramos que en el futuro lleguen a ser personas seguras, que sean capaces de mostrar sus mejores habilidades y sacar lo mejor de sí mismos. Para ello, te traemos algunas propuestas para ayudarte a conseguirlo, ¡lo mejor es que puedes empezar a ponerlas en práctica desde hoy mismo!:
1.Utiliza siempre frases motivadoras: Es muy importante felicitar siempre por el trabajo bien hecho, dar muestras de aprecio, y elogiar los aspectos más positivos de cada uno. Y si necesitas hacer una crítica, recuerda que debe ser siempre una crítica constructiva. ¿Te apetece empezar con una actividad en la que reflexionéis juntos sobre 15 frases para aumentar la autoestima?
2.Ponles retos: Las responsabilidades contribuyen a la autoestima, ya que les hace pensar que son capaces de realizar diferentes actividades y cumplir los objetivos, sintiéndose útiles e importantes. Los retos, eso sí, deben ser adecuados a su edad y capacidades. ¡Y no olvides ayudarles a superar la frustración si no llegan a conseguirlo!
3.Si hace algo negativo: En ese caso, es básico criticar el hecho, y no al estudiante. Decir “eres un vago”, “no trabajas” o “no entiendes nada” solo contribuye a etiquetar al niño y hacer que asimile las críticas como cualidades de sí mismo y, por tanto, las que le definen.
4.Trabaja su autoconocimiento: Ayudarles a conocerse bien a sí mismos les permitirá conocer sus puntos negativos y positivos, además de a potenciar los buenos e intentar mejorar los malos.
5.No hay errores, solo ocasiones de seguir aprendiendo: Es necesario también enseñarles a superar la frustración, a ser capaces de levantarse después de que no salgan las cosas como lo esperaban, a perder el miedo al fracaso. ¡Los miedos únicamente paralizan!
6.Cree en ellos: Solo así ellos serán también capaces de creer en ellos mismo. Transmíteles la capacidad de creer en sus sueños y así podrán conseguir todo aquello que se propongan .
7.Mejora tu propia autoestima: Lo dejamos para el final, porque quizá es uno de los consejos más difíciles. Sin embargo, es obvio que, si no conseguimos primero vernos positivamente a nosotros mismos, será casi imposible lograrlo con los demás.

sábado, 20 de diciembre de 2014

10 Consejos para estudiantes

1.Averigua tu estilo de Aprendizaje. Afortunadamente, no todos aprendemos igual. Algunos aprendemos mejor de forma visual, otros de forma auditiva y otros haciendo y experimentando. Es fácil saber cuál es tu estilo fijándote un poco en lo que haces en tu vida diaria o hablando con alguien que sepa del tema.
2.Averigua qué te funciona mejor según tu estilo. Por ejemplo, si eres del tipo cinestésico (necesita hacer y experimentar), te será más útil estudiar dándote paseos por la habitación que estando quieto. Si eres auditivo, te será útil recitar los temas, estudiar con otro compañero, etc,…gota
3.Método. Aunque parezca obvio, tener un método para cualquier cosa, nos permite ganar en eficacia, en tiempo, y en reducir enormemente la energía física y mental que gastamos. Tener un buen método de análisis de la información (lectura, subrayado, esquemas, mapas mentales), va a mejorar nuestra comprensión lectora y favorecer que los contenidos se instalen en la memoria. Lo mejor es que te lo enseñe un experto en la materia.
4.Aprende un método sencillo de subrayado. Como suele ocurrir, aquí hay variedad de opiniones: con varios colores, con dos, con uno, con rotuladores, fosforitos, bolígrafos, lápices,…..Lo ideal es que cada uno encuentre el estilo que más le conviene. Pero no debemos olvidar que el subrayado sólo debe ser una guía visual de las palabras clave del texto. Como tal, la técnica debería ser lo más sencilla y visual posible. Nuestra recomendación: bolígrafo verde y crear técnicas distintas para distintos tipos de ideas (principales, secundarias, etc,….). Ejemplo: palabras clave principales en un cuadro y secundarias subrayadas con una raya.
5.Gestión del tiempo. Trucos: exprime el tiempo al máximo. Haz las cosas con el mínimo tiempo posible para concentrar esfuerzos. La agenda se convierte en elemento fundamental en el que detallamos todos nuestros futuros pasos, especificando qué temas vamos a estudiar, cuándo repasar, etc,….Ritmo ideal: estudio media hora y descanso 5 minutos.
6.Lectura. Con unas sencillas técnicas de lectura rápida se consiguen varias cosas: leer más rápido, comprender mejor, y en consecuencia, ir cogiéndole gusto a la lectura. Esto puede marcar toda la diferencia.
7.Memoria. No es cuestión de tener mejor o peor memoria. Se trata de conocer unas técnicas que, si se aprenden y usan correctamente, puedo funcionar como un superordenador sin darme cuenta.
8.Atención y concentración. Aquí también podemos aprender sencillos ejercicios para mejorarlas, así como para relajarnos y afrontar el stress ante los estudios y los exámenes. Los orientales tienen una sencilla técnica que consiste en mirar fijamente una vela durante unos minutos.
9.Trabaja tus creencias. A veces nosotros mismos somos nuestro peor enemigo. Detectar y trabajar los pensamientos negativos que a veces tenemos (“no valgo”, “tengo que ser el mejor”, “no merezco el éxito”, etc,……) puede marcar un antes y un después en nuestra vida, librándonos de una fuerte carga de ansiedad.
10.Sé tu propio juez. Superar esas creencias limitantes, debería llevarte en definitiva a ser tú el el juez y el promotor de tu propia vida y de tus decisiones. Deja de compararte con otros y de ser víctima de las expectativas que los demás ponen sobre ti, sean buenas o malas.

Las rubricas de evaluacion

La rúbrica es un instrumento (con buenos niveles de precisión) que nos ayuda como maestros a valorar los aprendizajes de nuestros alumnos. En un sentido práctico, la rúbrica es una tabla que permite desglosar los niveles de desempeño de los estudiantes en relación a un aspecto determinado utilizando para ello criterios específicos de rendimiento. Puede que hasta aquí pueda parecer algo complicado, sin embargo su importancia en el proceso enseñanza-aprendizaje es clave.
Pero ¿Por qué es tan importante la rúbrica?.
Imaginemos por un momento que el profesor nos ha pedido como trabajo final de unidad, elaborar un informe y unas diapositivas sobre el aparato digestivo humano, facilitándonos para tal fin una lista con los contenidos que deben tomarse en cuenta. En este escenario clásico, la lógica puede llevarnos a suponer que cubriendo todos los puntos de la lista y construyendo unas diapositivas que incluya algunos textos y elementos gráficos debería bastar para lograr una calificación respetable. Finalmente llega el día de la presentación y luego de entregar el informe (conteniendo todos los puntos de la lista) y presentar las diapositivas (incluyendo textos e imágenes), el profesor termina aplicando una calificación de regular para abajo, digamos en escala vigesimal un 12.
Como seguro a muchos nos ha pasado, luego de escuchar la calificación hemos pedido acercarnos al escritorio del profesor para pedirle que por favor, nos explique la razón de tan baja calificación. Hecha la consulta, el profesor procede a explicar las razones que lo llevaron a aplicar dicha calificación (y que hasta ese momento era un secreto para todos). “No debiste redactar el texto del informe a espacio simple”, “hubiese sido mejor que incluyeras videos en las diapositivas en lugar de solo texto e imágenes”, “los contenidos no son lo suficientemente profundos”, “el número de diapositivas resultaron insuficientes”, “debiste encuadernar el informe”, “Debió incluir conclusiones aunque no lo indique en la lista de contenidos”, etc, etc. Quienes hemos vivido este tipo de experiencias sabemos que cuando el profesor requiere justificar una calificación argumentos no faltarán. Finalmente ante tal avalancha de razones optamos por retirarnos en muchos casos sintiendo que nuestros esfuerzos fueron poco valorados, y lo que es peor, sin terminar de entender lo que pasó.
Pero, ¿Por qué se suscitan este tipo de situaciones durante las evaluaciones?, ¿Es que el alumno no la tuvo clara desde un principio?, ¿El profesor tampoco?, ¿Será que el alumno es mediocre?, ¿El profesor no acepta que el alumno deje la impresión que sabe mas que él y necesita “bajarlo”?, ¿Será que el alumno no goza de la simpatía del profesor?, ¿Existen problemas de índole personal?, ¿El profesor espera que el alumno adivine sus expectativas?. Como podemos apreciar (y algunos recordar) estas situaciones suelen suscitarse en las aulas de clase y por su alto nivel de subjetividad, son difíciles de abordar y evitar.
En este contexto queríamos destacar la necesidad del uso de la rúbrica en el aula porque es un instrumento (que se entrega al estudiante antes de llevar a cabo una actividad evaluativa) que permite a profesores y estudiantes identificar con claridad y anticipación la relevancia de los contenidos así como los objetivos esperados de los trabajos académicos solicitados. A través de la rúbrica, es posible evaluar el desempeño de los estudiantes desglosando sus componentes para obtener una calificación final; además de constituirse como un herramienta sumamente útil para identificar fortalezas, debilidades, y para permitir que los estudiantes conozcan lo que requieren para mejorar. En resumen, con la rúbrica los estudiantes “tienen a la vista” no solo lo que el profesor espera de su desempeño académico sino también un instrumento que los guía y ayude.

¿Por qué la lectura fortalece la resiliencia en jóvenes y niños?



Cuando se está creciendo y te preparas para dejar de ser un niño, el golpe de la realidad puede ser muy duro. Se empieza a ver las dificultades en casa, las peleas, enojo, todo parece desteñirse del color rosa que solía  tener. Ves que las pequeñas tristezas, como perder tu juguete favorito, no se comparan a las tristezas del mundo adulto, como perder una abuela, un amigo. Todo es mucho más difícil si los padres han evitado cualquier tipo de dolor creyendo que es lo correcto para el bienestar de sus hijos.
Cuando un niño o adolescente ve una película o lee un libro con temáticas reales, tanto de felicidad como de tristeza, ve como los personajes solucionan esos problemas y se sobreponen, están logrando conocer el dolor humano poco a poco y sin tener que experimentarlo en carne propia, ayudando a que en un futuro conozca el sentimiento y no lo sorprenda de golpe y así tenga mejores herramientas para enfrentarlo.  (Los libros suelen tener reflexiones acerca de las situaciones y sentimientos vividos).
No todos son para todas las personas ni para todas las edades, hay temas que los niños tienen que conocer gradualmente y un libro que no haya sido previamente leído por los padres puede resultar contraproducente a nuestros propósitos. Por eso hay libros para todas las etapas de la vida. Otro ejemplo de efecto contraproducente puede ser por ejemplo al querer ayudar a una persona deprimida a afrontar el problema y pedir que lea un libro sobre un personaje que triunfa sobre la adversidad. En este caso en lugar de que la persona vea cómo el personaje se sobrepone al dolor, puede que la depresión solo le deje ver el terrible dolor y dificultades que está pasando.

No solamente los temas tristes nos dejan algo, también es importante conocer lo bueno que la vida puede dar, todas las bellas experiencias que podemos hacer y tomar de la vida y así disfrutarla.

Está es una razón y existen muchas más para la lectura, por ejemplo contribuye a mejorar la memoria, concentración e incluso reduce el estrés.  Aunque los libros son una herramienta útil nada sustituye el ejemplo y enseñanza de los padres y las experiencias propias.


miércoles, 17 de diciembre de 2014

La Escuela mata la Creatividad

Tal es el título de una de las conocidas charlas de la pedagoga  Marcia Orozco, excelente maestra, que siempre dará qué pensar a quien le escuche sin miedo. Ante la demoledora sentencia, la escuela mata la creatividad, Marcia y yo pusimos en marcha una pequeña iniciativa: dar a unos estudiantes de siete años de la I.E. San Francsco de Asis en Chaclacayo un cuaderno de contenido libre. En él rotularon una portada con la frase Yo soy artista y se pusieron a trabajar. Aquel cuaderno, en un momento, se transformó en su tesoro: escribían diarios, inventaban historias, copiaban pasajes de cuentos, pintaban dibujos y hacían collages con recortes de revistas.
Un niño elaboró un manual de rocas y minerales, una niña reprodujo, con brillantes colores, las figuras geométricas que conocía, otra practicó el concepto de simetría pintando mariquitas. Un niño, que hasta hace poco pintaba figuras humanas sin cuerpo, se puso a diseñar complejos edificios de formas rectilíneas, otro hizo un guía de futbolistas y varios mapas físicos y políticos.  Muchos hicieron dibujos y cuentos con sus profesoras como protagonistas, alimentando, de paso, nuestro narcisismo hasta el infinito. 
De vez en cuando, en especial los sabados en la tarde nos reunimos en la alfombra y mostramos los cuadernos, respetando siempre la libertad de no participar. En definitiva, una idea sencilla para mantener despierta esa iniciativa de los niños que, aparentemente, los adultos vamos sofocando a medida que crecen.        
Dentro de la presentación de Marcia, me gusta especialmente la anécdota de la niña que está pintando a Dios. “¡Pero nadie sabe cómo es Dios!” le dice el profesor. “Bueno”, contesta ella, “lo sabrán en cuánto acabe mi dibujo”.
Marcia afirma que todos los niños y niñas están dotados de un talento que desperdiciamos sin piedad. Defiende que el desarrollo de la creatividad en el colegio es tan importante como la alfabetización de los alumnos, y que deberíamos darle el mismo estatus. Nos pone especialmente en evidencia diciendo que los profesores no explicamos a los niños que equivocarse es una parte imprescindible del proceso de aprendizaje. De hecho, los más pequeños tienden a buscar soluciones cuándo no están seguros de la respuesta pero, a medida que crecen, empiezan a inhibirse por miedo al error. (Es cierto que a nuestros alumnos les cuesta entender que hay muchas cosas que son como ellos quieran: se trata de que tomen sus decisiones. A partir de los 8 años enseñan un dibujo espontáneo preguntando ¿Es así? Nunca un niño más pequeño preguntaría lo mismo a un adulto. Su dibujo es lo que es. En los casos más flagrantes un profesor puede llegar a decir algo así como ¡Pero cuándo se ha visto a alguien con el pelo verde!). Sin embargo, si no se está preparado para equivocarse, nunca se podrá ser original. Marcia describe cómo los sistemas educativos de todas partes del mundo tienen algo en común: primar las asignaturas instrumentales sobre las artísticas y la educación física. Nuestros sistemas educativos, ideados con arreglo a las necesidades de la segunda revolución industrial, necesitarían de una revisión en profundidad, ahora que ser original es precisamente lo único que nos va a situar por encima de lo que un ordenador puede realizar. Esto explicaría por qué mucha gente brillante piensa que no lo es: el talento artístico que poseen fue menospreciado -incluso estigmatizado- en el colegio, en el que sólo se valoró un tipo de inteligencia: la académica. Parecería que toda la Educación Inicial, Primaria y Secundaria fuera un complejo proceso de preparación de la selectividad universitaria. Deberíamos tener en cuenta las tres cosas que sabemos sobre la inteligencia: que es diversa (visual, auditiva, cinética…), que es dinámica (pues la creatividad se produce en la interacción de la forma de ver las cosas por distintas disciplinas) y que es absolutamente personal. Una bailarina, por ejemplo, sería alguien que necesita moverse para pensar. Una escuela eficaz aconsejaría a sus padres que la llevaran a clase de baile; una escuela convencional propondría medicar a la niña para mantenerla quieta. Concluye Marcia que debemos usar el don de la imaginación humana de manera sabia, reconociendo la riqueza que nos aporta la creatividad, y educando todas las facetas de la personalidad del niño para ayudarle a enfrentar su futuro.