El uso de la tecnología móvil en el aula es un tema de actual debate entre todo tipo de docentes y equipos directivos de centros educativos tantos estatales como particulares. Es importante entender el uso del móvil como una herramienta más dentro del aula como los ordenadores, las tabletas, los libros o las pinturas. Existen múltiples ventajas y retos en el uso de esta tecnología y como cualquier otro elemento pedagógico, puede ser positivo o negativo según las necesidades del alumnado, profesorado, los objetivos de aprendizaje, las actividades a realizar, etc.
Con todo, es importante que tengamos en cuenta que podemos aprovechar parte de las ventajas del uso de los smartphones que muchos menores poseen también fuera del aula, es decir, como docentes puedes realizar actividades a través del móvil recomendando acciones, actividades o aplicaciones. En la actualidad todos estamos acostumbrados a usar el teléfono móvil, si bien es cierto que, por desgracia, no siempre lo utilizamos adecuadamente tanto adultos como menores. De hecho la acción de prestar atención al móvil en lugar de a las personas con las que estamos acompañados, es algo cada vez más frecuente también entre los y las menores. Sin embargo, este es un tema que pueden trabajar con el móvil en las aulas de manera ventajosa:
1. Aprender a hacer un buen uso de la tecnología. Dentro del aula se pueden establecer normas que deben cumplirse. Así como el profesorado sabe utilizar este aparato tecnológico, puede enseñárselo a su alumnado. Además, esto permite trabajar de manera real temas de seguridad y enfatizar la competencia digital.
2. Acceso a Internet en todo momento, aunque no se disponga del aula de ordenadores del centro. Disponer de móviles en las aulas permite una mayor flexibilidad para realizar tareas conectadas sin necesidad de disponer del aula de informática. Esto abre un mundo de posibilidades desde el pupitre o el lugar donde se encuentre el alumno. Acceder a los documentos del profesorado, leer el periódico, consultar y participar en el blog del aula, aprender a buscar, usar el diccionario, crear, editar y publicar contenido de texto, audio, imagen, etc.
3. Uso de herramientas educativas tecnológicas. Sin necesidad de disponer de otros elementos, sino de los que los propios alumnos tienen, se puede trabajar con realidad aumentada dentro del aula, realizar evaluaciones en el momento, completar proyectos con el uso de redes sociales, uso de aplicaciones específicas por materias o competencias, etc.
4. Aumento de la motivación y participación. El uso de los móviles permite una comunicación diversa según las necesidades de cada alumno o alumna, lo que permite que la metodología se personalice según sus necesidades, así como el modo de trabajo, de consulta, etc.
5. Permite realizar el seguimiento del método de enseñanza-aprendizaje. Como en toda tarea, la tecnología móvil permite a los estudiantes llevar su propio registro diario de actividades, planificar el estudio en tiempo y calendario, registras sus ideas, etc. Como veíamos en el caso de la gamificación, puede facilitar una mejora en el seguimiento, así como introducir, por ejemplo, evaluación continua.
La utilización del móvil en el aula implica la necesidad de trabajar todas sus bondades, pero también pasa por asumir y hacer frente a los retos que supone introducirlo en el día a día escolar. Por supuesto, el no utilizar el móvil en el aula puede ser una respuesta más que adecuada, ya que depende de las características del alumnado y del profesorado.
Así, algunos retos que son necesarios afrontar son:
1. Divergencia de acceso a la tecnología, la realidad es que los menores comienzan a tener acceso a los móviles a los 8 años (de hecho suele ser el regalo estrella en el momento de la comunión), si bien es cierto que en el Perú, en el año de 2015, a los 12 años el 70% disponía de móvil y a los 14 el 85%
2. Actualmente no existe una normativa del Estado Peruano sobre el uso de celulares en el aula de clases, por ello, es un reto el uso o no de estos dispositivos ya que puede vulnerar normativas concretas y que cada docente deberá tener en cuenta.
3. Proceso de adaptación, la dispersión, la puesta de límites, los niveles de atención son algunos de los grandes miedos que se tienen en un proceso de introducción del uso de los móviles en las aulas. Si bien es cierto que pueden darse, los profesores que lo han utilizado muestran que no son hechos más distintos que con la introducción de otros elementos como fueron los ordenadores. Para minimizarlos, es importante marcar normas de uso del smartphone para todas las personas del colegio, también los adultos, e incluso hacer partícipes a los y las estudiantes en su redacción.
4. Uso inadecuado del teléfono móvil donde en ocasiones el uso del teléfono móvil puede conllevar acciones negativas hacia otras personas como ciberbullying o ciberacoso, extorsion, publicaciones negativas sobre docentes en redes sociales, etc., si bien esto no es consecuencia del uso en el aula, sino del uso de manera genérica, cosa que utilizando el móvil en el aula se podría trabajar en grupo.
5. Falta de objetivos pedagógicos, quizá uno de los mayores retos como docentes es la introducción de una nueva herramienta con un sentido, es decir, dentro de una programación y de una metodología. Es necesario entender que el móvil no es la salvación de nuestros alumnos, sino una herramienta más de trabajo, a tener en cuenta antes de integrar el móvil en el aula.
Como docente no me opondria, mas bien hay redactar una guía práctica para introducir dispositivos móviles en el aula. Con todo, en líneas generales es importante tener en cuenta algunos aspectos para protocolizar el uso del móvil:
1. Definir al alumnado, su tecnología, sus gustos, usos, costumbres.
2. Definir los objetivos de aprendizaje, currículo, competencia, capacidades e indicadores, etc.
3. Elección del dispositivo y del número de dispositivos móviles, propios o no, por grupos o individual.
4. Definición del tiempo de uso y concreción de las acciones curriculares: toda la jornada, por materias, por proyectos, etc.
5. Implementación y materiales con conexión o sin conexión, 4G o wifi, con apps gratuitas o de pago, recursos propios o ajenos.
6. Delimitar el uso en el aula y la participación, ¿cuándo?, ¿cómo?, ¿qué? y ¿quién?
7. Evaluación, del mismo modo ¿cuándo?, ¿cómo?, ¿qué? y ¿quién?
8. Gestión de crisis: ¿qué hacer si existe un fallo tecnológico, la familia no desea que se use el móvil en el aula…?
Ya que la gran mayoría de los estudiantes de escuelas públicas y privadas tienen sus celulares tanto en el nivel de primaria y secundaria les doy pautas o estrategias para que den un buen uso a su celular en las horas de clases de lunes a viernes y no estén dedicándose por ejemplo a jugar con ese juego llamado Pokémon que no tiene nada de didáctico:
1. Hacer videos demostrativos de algunas habilidades, por ejemplo armar el cubo, recitar una poesia, dominar a pelota en la clase de Educación Física.
2. Grabar experimentos científicos donde los estudiantes demuestran sus habilidades con la ciencia, la tecnología y la ecología.
3. Realizar vídeos durante las visitas a los museos, sitios históricos y ecosistemas.
4. Pedir a los alumnos que hagan pequeñas explicaciones de algun tema desarrollado durante el dia.
5. Desarrollar experiencias de autoevaluación, con valuación y heteroevaluacion y el aprendizaje cooperativo.
6. Práctico entrevistas a expertos en algunas materias, puede ser de matemáticas, historia, lenguaje, etc.
7. Grabar clases de educación física, donde se práctique el atletismo, el fútbol, el volé y, la gimnasia rítmica etc.
8. Recoger la respuesta de un trabajo compartido de toda la clase.
9. Grabar un recorrido por el centro escolar.
10. Utilizar video para compartir información académica y actividades con los padres.
11. Pasear por el patio y hacer pequeñas entrevistas a compañeros, sobre las noticias nacionales y extranjeras.
12. Grabar las partes claves de la clase para colgarlas en un entorno virtual de aprendizaje.
13. Explorar y grabar el exterior del centro en distintas épocas del año.
14. Pedir a los niños que graben y expliquen sus actividades diarias. Por ejemplo ¿Que hacen sábado y domingo? ¿Cuales son sus habitos de estudio? ¿Cuales son sus habitos alimenticios?, etc.
15. Fomentar la colaboración en la resolución de problemas.
16. Trabajar con alumnos con problemas de aprendizaje como la discalculia, la disortografia, la dislexia, la disgrafia, etc. y documentar sus logros de aprendizaje.
17. Aportar experiencias a los profesores.
18. Hacer vídeos de presentación del centro para los nuevos alumnos.
19. Hacer la presentación visual de un poema, composición, acrostico, ect.
20. Grabar espectáculos de los niños en actuaciones, como el día de la madre o en el festival de danza.
21. Crear un anuncio de un libro leído por los alumnos.
22. Pedir a los profesores que grabé un video al acabar la programación bimestral.
23. Grabar escenas de una excursión, paseo al parque, caminatas al aire lre etc.
24. Grabar una presentación para un compañero de clase.
25. Crear anuncios promocionales de equipos o grupos de clubes que funcionen en el centro educativo
26. Participar en la evaluación de los trabajos hechos por compañeros de otros centros educativos.
27. Grabar sentimientos y actitudes.
28. Usarla como herramienta de motivación.
29. Hacer un abecedario visual.
30. Grabar una conferencia a la que asiste el profesor.
31. Hacer un vídeo sobre habilidades sociales.
32. Hacer observaciones de las condiciones metereologicas.
33. Traducir a otras lenguas textos.
34. Grabar ensayos de presentaciones de danzas obras teatrales y otras actividades.
35. Crear reglas de conducta e instrucciones claras.
Ahora hasta hace poco tiempo el teléfono móvil era un elemento restringido para los alumnos en colegios e institutos, en muchos casos los profesores hacían decomiso de los mismos antes de iniciar las clases porque lo consideraban un elemento contaminante y que distraía a los jóvenes de las actividades educativas en las que participaban.
Con el tiempo y en paralelo con la evolución tecnológica de estos dispositivos, la percepción y valoración del Smartphone ha cambiado radicalmente, sobre todo en los docentes que están introduciendo las pedagogías emergentes en sus procesos formativos. Los maestros ya comprenden que la tecnología es un aliado de la educación y ahora el Smartphone está integrado a una variedad de recursos o aplicaciones (APPs), y ha dejado de ser un simple instrumento de comunicación de voz para convertirse en nuestro “ordenador móvil” con acceso permanente a la red. Es así que hoy en día un Smartphone no sólo sirve para interactuar en WhatsApp, Facebook o jugar al Angry Birds. Sostener eso es ignorar todos los recursos que pueden ser utilizados en una multitud de estrategias y actividades desde una perspectiva educativa. Antes de continuar, vale la pena recordar que esto no significa que debamos cambiar de repente la forma en que enseñamos y permitir el uso de los Smartphone y sin control. Lo que se busca es cambiar algunas de las connotaciones negativas en torno a los teléfonos inteligentes y considerar todas las nuevas herramientas didácticas que tenemos a nuestra disposición. Para que los estudiantes usen teléfonos inteligentes en la escuela de manera responsable, es importante que establezcamos límites y reglas de antemano. Y sobre todo que el maestro o docente tenga un conocimiento real de las funcionalidades del mismo para incentivar el aprendizaje de sus alumnos. Aquí algunas de las funcionalidades que nos aporta el Smartphone para los procesos pedagógicos:
1. Leer las noticias: muchos profesores a menudo incluyen artículos de noticias como parte de sus métodos de enseñanza (por ejemplo, en la economía). Con un sin fin de reunir las aplicaciones móviles de noticias, puede traer noticias y temas de actualidad en el aula en un instante.
2. Hacer fotos: teléfonos móviles pueden utilizarse como cámaras para ilustrar el trabajo y presentaciones. Grabar vídeos similares: hasta el último punto. Por ejemplo, los videos pueden ser utilizados para grabar experimentos y posteriormente incluirlos en los proyectos.
3. Diccionario: hay una multitud de aplicaciones de diccionario que le permiten comprobar el significado de una palabra al instante.
4. Traductor: de nuevo, esto puede ayudar con sentido y explicación de una palabra extranjera al igual que la aplicación de diccionario.
5. Calendario: no más olvido o confusión acerca de fechas de exámenes o los plazos de presentación. Ahora tiene aplicaciones que permiten sincronizar calendarios. Hacer notas: la inspiración no siempre viene cuando queremos que lo haga. Por esa razón, trate de usar su dispositivo móvil. Smartphones nos permiten tomar notas en cualquier momento y en cualquier lugar.
6. Leer libros electrónicos: cuando el aprendizaje, la solicitud de un puesto de trabajo o ir a la universidad, leer archivos PDF y manuales puede ser obligatoria. Por esta razón, las aplicaciones como Kindle nos permiten leer libros y manuales desde cualquier lugar.
7. Juegos educativos: se habla mucho de la gamification del proceso educativo, es decir, la necesidad de transformar el aprendizaje en un juego lo más posible. Hay literalmente cientos de aplicaciones educativas que pueden hacer que el aprendizaje sea más agradable y más fácil en los estudiantes.
8. Evaluar los estudiantes: los teléfonos móviles pueden ser utilizados para monitorear y controlar el trabajo del curso y examen resultados de un estudiante. De esta manera, los maestros tienen acceso en todo momento a un estudiante en particular y pueden ver si el estudiante está progresando o no.
9. Realizar clase virtual: con un Smartphone los alumnos pueden participar en una clase en línea desde cualquier lugar, interactuando con el docente y sus compañeros de clase.
Estas son sólo algunas de las ventajas que podemos aprovechar de la tecnología que aporta un teléfono inteligente, dependerá del maestro y del tipo de materia que se imparte el establecer la estrategia de uso más adecuada.