miércoles, 31 de diciembre de 2014
5 Estrategias para lograr que los niños escuchen
También es una constante en las charlas entre madres y padres: “Es que no hacen caso”, “Me canso de repetir las cosas y nada”, “Es como hablarle a la pared”…
No estamos ya en la época del autoritarismo, donde el profesor hablaba y los alumnos escuchaban con miedo a participar, donde los padres decidían y los niños acataban sin rechistar. Estamos en la época en la que nos jactamos de utilizar el diálogo, pero ¿sabemos dialogar?. A dialogar también se aprende, y el diálogo como forma básica de interacción y aprendizaje también se enseña, y una de las cosas más importantes en este punto es aprender a escuchar.
alguien_escucha-300x225
Me han parecido buenas y prácticas las estrategias que propone Rebecca Alber en el blog de Edutopia para motivar la escucha activa en los alumnos, y que traducidas por mí y aportando mi pequeño toque personal serían las siguientes:
5 Estrategias para lograr que los niños escuchen
1. Dilo sólo una vez.
Cuando los niños se acostumbran a oír las órdenes una, dos, tres, hasta cuatro veces.., ¿para qué van a prestar atención a la primera?
Recálcales que tú acostumbras a dar la orden una sola vez. Si alguno, a pesar de ello, anda distraído (que será lo más normal) no le repitas la orden tal cual lo hiciste anteriormente, dale alguna pista sobre lo que has dicho previamente, y recuérdales que deben contar hasta 3 antes de preguntarte. De ese modo se aseguran de no preguntar cosas que igual ya saben.
2. Habla, muévete y para.
Mientras explicas o hablas acerca de un tema en concreto, haz que estén atentos, avisándoles de que harás pausas y elegirás a uno de ellos para que les explique a los demás su visión acerca de lo que han escuchado.
También puedes hacer pausas para que ellos hablen entre sí acerca de lo que han escuchado (lo que también te sirve a ti para comprobar su comprensión)
3. Utiliza “señales manuales”.
Se trata de signos que les permita expresar opiniones acerca de lo que se está escuchando en clase.
Por ejemplo, puedes leer un texto de opinión o una cita de algún personaje histórico y puedes pedirles su opinión del siguiente modo: “Los que estéis de acuerdo, levantáis un dedo; los que no lo estéis levantáis dos, y los que estéis indecisos levantáis tres.”
Esta estrategia permite la participación de toda la clase, y “da voz” a aquellos más tímidos.
4. Prestar atención, parar y parafrasear.
Conocer estrategias para escuchar a los demás e interpretar sus puntos de vista es una habilidad básica e imprescindible.
Cuando los niños trabajan en grupos se puede utilizar la siguiente técnica:
a. Asigna un portavoz por grupo de trabajo (que puede ir rotando)
b. Pide a los demás que escuchen atentamente y eviten interrumpir mientras el otro habla. Sólo deben escuchar.
c. Cuando la persona que está hablando deja de hacerlo, entonces los demás parafrasean algo que el compañero ha dicho: “Tú crees que…”, “No estás seguro de…”, “Para ti es importante…”
d. Después de ello, pueden continuar con un enunciado centrado en el “Yo”: “Ya veo lo que quieres decir…”, “No estoy de acuerdo con lo que dices…”
Utilizar este tipo de frases y parafrasear constituye una herramienta muy útil para los alumnos, para aprender la forma correcta de escuchar y de mantener una conversación.
5. Que planteen sus propias preguntas
Cuando los alumnos estén escuchando un discurso, viendo un documental o escuchando una historia leída por otros interrumpe varias veces para que escriban preguntas acerca de lo que acaban de escuchar.
De este modo se activa su escucha, atendiendo a aquellos aspectos que no tienen clavos o que pueden presentarles dudas.
Es cierto que “entrenamos” más para dar respuestas que para hacer preguntas, pero con esto último conseguimos poner el foco de atención en aquello que los alumnos no han entendido o que para ellos puede ser un verdadero “misterio”.
Por último, hay que transmitir a nuestros alumnos la importancia y el valor de saber escuchar, y enseñarles las técnicas verbales y no verbales para ello (mantener el contacto visual, mostrar interés, no cortar la conversación de los demás…)
“Una de las más sinceras muestras de respeto hacia el otro es, sin duda, prestar atención a lo que dice”
Buscando al profesor particular ideal
La mayoría de los padres esperan hasta la entrega de notas para reconocer cuáles son las asignaturas que dificultan o disminuyen el promedio general de sus hijos, tomando como esto la primera alerta para buscar ayuda complementaria a la escuela, es decir, contratar a un profesor particular para que refuerce esos contenidos de aprendizajes en el hogar del estudiante.
Recomendamos que lo primero que debes observar es cómo estudia tu hijo, si asiste regularmente a clases, tiene los útiles escolares necesarios, su capacidad de concentración, si cuenta con un hábito de estudios y/o un horario determinado para realizar sus tareas en casa. Tras detectar cuál es el punto débil de tu hijo, comienza a buscar quien puede servir de apoyo para su estudio.
Luego para buscar a un profesor particular idóneo, debe ser alguien profesional que genere confianza tanto en los padres como en el niño, si bien es un gasto económico extra para la familia, debe tomar en cuenta que esta persona viene a reforzar los contenidos de aprendizaje expuestos en el colegio, resolver las dudas que quedaron pendiente en clases y motivar al estudiante a generar un hábito de estudio, si éste no lo tiene.
Con frecuencia, algunos padres optan por continuar las clases particulares durante el verano, donde el profesional debe fortalecer su ritmo de enseñanza, solicitando incluso tareas para que el niño mantenga y mejore las habilidades que se ven disminuidas en ciertas asignaturas.
Profesionales y estudiantes
En la actualidad son muchos los profesionales y estudiantes, que no necesariamente son pedagogos, quienes ofrecen sus servicios de clases particulares para los alumnos de educación básica y media. Siendo las con alta demanda, las matemáticas y la física, que pueden ser enseñadas por diferentes ingenieros, ya que incluso los profesores con mención en matemática escasean en nuestro país.
Para mayor seguridad de los padres y conocer la diversas ofertas recomendamos el sitio "Soy Profe" , una plataforma gratuita que cuenta con más de 500 profesores y estudiantes universitarios registrados que buscan enseñar a aquellas personas que quieran aprender.
El sitio tiene un buscador que permite seleccionar la asignatura, curso y región, la cual arrojará un profesor que tendrá, no sólo sus datos profesionales, sino también la calificación realizada por los usuarios. Aquí también los padres pueden consultar por mensaje privado detalles de las clases y ver los valores que tienen las sesiones. (Costos acorde al mercado).
martes, 30 de diciembre de 2014
La Curiosidad mato el aburrimiento
Conversando con Marcia en mi casa de Chosica, me conto la siguiente anecdota: Una profesora pide a los alumnos que localicen el tema en el libro de ciencias. Lo leen y colquen en la pizarra un gráfico o imagen con las fases lunares. Explica por qué se producen y enumera las distintas fases mostrándolas con una imagen. Los alumnos hacen los ejercicios correspondientes en su cuaderno. La profesora pone un video, donde se aprecian, secuenciadas, las distintas fases lunares. A continuación hace la siguiente pregunta: “¿Por qué no vemos a la luna siempre del mismo modo?” Los alumnos comienzan a dar sus respuestas, unas más acertadas que otras, pero sin criticar ninguna, sigue haciendo más preguntas, guíandoles hasta que llegan por ellos mismos a la explicación correcta.
Hay una clara diferencia entre estas dos situaciones: una promoverá la curiosidad de los niños, la otra, muy poco.
Entonces yo le pregunté a Marcia, ¿Qué es curiosidad y como funciona?
“La curiosidad surge cuando la atención se enfoca a un vacío de información en el propio conocimiento. Estos vacíos producen la sensación de privación, que llamamos curiosidad. El individuo curioso está motivado para obtener la información que le falta, o para reducir o eliminar la sensación de privación.”
Para Marcia, ésta no es sólo un estado de ánimo, sino una emoción, un poderoso sentimiento que nos empuja “más allá”, a buscar el conocimiento que nos falta. “La curiosidad, lo que es diferente y sobresale en el entorno, enciende la emoción.Y con ella, con la emoción, se abren las ventanas de la atención, foco necesario para la creación de conocimiento.”
No hay muchos estudios neurológicos acerca de la curiosidad, pero conocer qué factores la estimulan a nivel cerebral podría ayudarnos para provocarla en aquellas personas menos “curiosas”.
Lo que sí que se ha descubierto es que la química de nuestro cerebro cambia cuando sentimos curiosidad por algo, y estos cambios neuroquímicos nos ayudan a aprender y retener mejor la información.
•Las personas aprenden mejor aquella información sobre la que sienten curiosidad.
•Cuando el cerebro se encuentra activado en “modo curiosidad”, recuerda mejor incluso la información incidental o no relevante en ese momento.
Esta capacidad del cerebro “curioso” para recordar y aprender es un fenómeno del que los profesores deben ser conocedores y utilizar a diario en el aula. Pero, ¿no son los niños ya de por sí, curiosos por naturaleza? Sí, aunque algunos más que otros, entonces “Por qué a los niños no les gusta ir al colegio“, es porque simplemente “Al cerebro no le gusta pensar”, y si puede recurrir antes a la memoria para solucionar un problema o aprender un concepto nuevo lo hará, antes de tener que invertir energía pensando. Por ello, para incentivar a las personas a pensar y a aprender cosas nuevas hay que establecer las condiciones cognitivas adecuadas. ¿Cómo?
1. Enfrenta a tus alumnos a problemas que les suponga un desafío, pero que no sean tan difíciles como para frustarlos.
Trabajar en equipo para solucionar un problema, o realizar una propuesta o actividad sobre algún tema, que después será evaluada por el resto de la clase despierta el interés por adquirir más información que la únicamente facilitada por el profesor.
Por esta razón, el Aprendizaje Basado en Proyectos es una metodología tan eficaz en cuanto a motivación, ya que estimula continuamente al alumno a explorar nuevos conocimientos que satisfacen su curiosidad.
2. Comienza siempre con una pregunta.
Los adultos estamos demasiado “predispuestos” a hablar,a corregir y a contestar, pero no le dedicamos tanto tiempo a preguntar. Las preguntas abren siempre un “vacío de información”, que activa al cerebro a completar esa carencia:
“¿Por qué vemos el cielo de color azul?”
“¿Cómo sabemos lo que pesa la Tierra?”
“¿Qué les pasaría a los astronautas si no llevaran traje espacial?”
3. Enciende el fuego.
La curiosidad requiere de un conocimiento inicial. No podemos sentir curiosidad sobre aquello de lo que no sabemos absolutamente nada. Sin embargo, tan pronto como conocemos algo que despierta nuestro interés, queremos saber más…Para activar el estado de curiosidad hay que “encender el fuego” con alguna información intrigante pero incompleta. Utilizar videos, historias de personajes reales, metáforas, hacer debates sobre algún tema…, puede servir como introducción a un tema y es una forma de despertar la curiosidad sobre ello. Por ejemplo, contar una historia previa a una clase.
“El aburrimiento se cura con la curiosidad. La curiosidad no se cura con nada.”
La Educacion en el Peru
“En el Perú existe una gran oferta laboral docente muy importante, Según el Censo Escolar último, el Estado peruano emplea a 324,995 educadores, aunque los índices de oferta del empleo muestra que existe un 10% (58,281) de educadores desempleados. El presente año 2013 el Ministerio de Educación ha presupuestado 51,000 plazas de contrato a nivel nacional.
El acelerado crecimiento de instituciones educativas privadas en ciudades de la costa peruana ha elevado el empleo de los educadores, representando el 28% (171,200) con respeto a docentes nombrados en el Estado. La oferta de empleo de educadores para escuelas privadas muestra el modelo económico que experimenta nuestro país; El Estado renuncia progresivamente a proporcionar educación de calidad a la población, se incentiva que sean inversionistas privados quienes se encarguen de una responsabilidad que les compete exclusivamente.
La selección y acceso laboral de los educadores muestra conflictos durante la competencia entre profesionales y normalistas egresados de institutos pedagógicos; además de la inclusión de profesionales que no han sido formados como educadores. Los últimos concursos de nombramiento y contratos aún muestran la equivocada percepción de funcionarios del Ministerio de Educación de elaborar pruebas de conocimientos generales en la creencia que esto acredita la calidad profesional de los educadores. En realidad omiten el nivel de experiencia y productividad que posee un educador. Este tipo de concurso ha detenido en parte el clientelaje político que caracterizaba la obtención de empleo en Educación, bastaba con presentar el carnet partidario para obtener nombramiento sin haber pisado un aula universitaria”
SALARIO DE LOS EDUCADORES EN PERÚ.
El Estado Peruano a través del Ministerio de Educación, -como órgano intermedio-, asignó el año anterior un Presupuesto Institucional Modificado (PIM) para el sector de s/17,189.300, lo que representa un 3.31% en referencia al Producto Bruto Interno para el año 2012. Este porcentual es el aproximado a lo que se ha venido asignando en los últimos seis años (ver cuadro 01), sin embargo, en el mayor de los casos solo se ejecutan en un aproximado del 85%, lo que en realidad indica que el Presupuesto real en Educación sólo se ejecuta en 2.78%.
La UNESCO sugiere que para mejorar la calidad educativa en el mundo, cada país debe invertir no menos del 6% de su Producto Bruto Interno (PBI). El Perú, -según el informe de la Comisión económica para América Latina (CEPAL)-, es una de las naciones en Latinoamérica con menor presupuesto educativo. En el gráfico 03 puede observarse las líneas de tendencia entre PBI y presupuesto educativo: mientras el PBI indica crecimiento sostenido, en cambio el presupuesto educativo se ha mantenido en 3%. Diferentes gobiernos en Perú se comprometieron a cumplir con el incremento al 6% en el presupuesto general de la república en un plazo mediano, aún no se ha cumplido dicha meta presupuestal.
El exiguo presupuesto también se refleja en el salario de los educadores. A excepción del gobierno de Alejandro Toledo, quien duplicó el sueldo, los demás gobiernos han supeditado los incrementos salariales al condicionamiento de una ley magisterial aprobada recientemente.
El salario de los educadores en Perú es diferenciado, varía según el tipo y nivel y la jornada laboral, es decir, existe un salario escalonado en el educador de nivel superior en cualquiera de sus formas, así como en educadores de Educación Básica Regular (EBR). Teniendo en cuenta que los educadores de EBR representan el mayor porcentaje laboral en nuestro país (ver cuadro) no existe pirámide salarial, sino una base muy ancha respecto a renumeración privilegiada que perciben un porcentaje muy bajo de educadores.
Bajo la nueva ley de educación los docentes de Educación Básica Regular en el primer nivel y con una jornada laboral de 24 horas perciben un salario promedio de 1,243.39 soles (478.22 USD), la cual va ascendiendo paulatinamente en un promedio de 100, 150 y 200 soles hasta el octavo nivel. Este sueldo resulta reducido comparado con el monto oficial de la canasta básica familiar que es de 2,240.00 soles (861.54 USD). Este salario es percibido por la mayoría de educadores y representa sólo el 55.50% de la canasta básica, muestra la insuficiente capacidad adquisitiva de un educador. Además, si se agrega el gran porcentaje de educadores que laboran en el sector privado y sus salarios representan sólo el 31.25 % de la dicha canasta familiar.
Ante tal situación salarial, las huelgas magisteriales son frecuentes y reiteran una justa demanda por el incremento salarial. Los reclamos de los educadores son tratados por cada gobernante como “conflictos superables” que se aplacan con pequeñas dádivas, -usualmente bonos económicos,- como pago por única vez. Desencadenada una huelga esta es aprovechada por gobernantes y funcionarios de educación para culpar a los educadores por la baja calidad educativa o por las consecuencias de dichas huelgas, donde se perjudica a los discentes.
A fin de atenuar necesidades vitales y obtener una mejor calidad de vida, los educadores optan por nuevas opciones laborales; trabajos a medio tiempo que puedan realizar fuera de sus horarios laborales, perdiendo la función de exclusividad al trabajo docente que se requiere. Esto deja entrever una interrogante ¿En qué momento este educador prepara y planifica sus clases? Es obvio que un educador estará concentrado en solucionar primero sus necesidades básicas y después se abocará a la planificación de lecciones en el aula. Esto constituye un indicador notorio y preciso que nos permite comprender que el desenvolvimiento docente, ya sea en el aula o en la sociedad, dependerá en gran medida de una mejora de sus capacidades adquisitivas.
INDICADORES DEL DESEMPEÑO EN EL AULA
El trabajo profesional de un educador requiere una especialización que no aporta ninguna otra carrera profesional: la formación de habilidades, destrezas y virtudes para educar a sus discentes, logrando a través de ello, fines educativos que involucran factores exógenos y endógenos. El producto más delicado y con potencialidad que forma es el ser humano, su educación no puede quedar en manos de improvisados que consideran la profesión del educador como la última opción laboral.
Esto requiere evaluar la calidad del desempeño docente, de sus cualidades como educador y de los productos que va forjando en las aulas. ¿Cómo se evalúa este desempeño docente? Los resultados se observan en los procesos adecuados de aprendizajes eficientes que realiza en el aula y por sus productos que obtiene después de un proceso prolongado de formación con valores y conocimientos.
Para el primer caso, los procesos adecuados de aprendizajes eficientes se reflejan en el discente como producto de un proceso planificado desde el currículo, en su desarrollo óptimo deberá existir un compromiso dual entre educadores y discentes o sus padres, el compromiso por aprender necesita predisposición y preparación y, sobre todo, contar con condiciones materiales favorables para lograr éxito.
Existen muchos indicadores para evaluar el desempeño docente, una de ellas es el dominio profesional. La característica que evalúa es la información teórica que posee el educador, mide la capacidad informativa y de conocimientos pedagógicos, el nivel académico, y la capacidad resolutiva. Este tipo de indicador no evidencia la experiencia acumulada respecto a las destrezas personales y la estrategia didáctica que posee el educador en su desempeño dentro del aula.
Un indicador de percepción y opinión de los discentes sobre el trabajo del educador en el aula suele ser relativo al momento de aplicarse, requiere de un nuevo modelo educativo, una práctica de libertad participativa y madurez del discente. Sus criterios evaluativos resultarían objetivos si tuvieran un adecuado manejo de los instrumentos de evaluación. Siempre existe riesgo que las evaluaciones de los discentes respecto a los educadores prevalezcan factores subjetivos y surjan condicionamientos de diversa índole.
La autoevaluación proveniente del educador es un indicador de conciencia frente a los resultados de su desempeño en el aula, resulta interesante saber como considera cada uno los avatares del propio desempeño en el aula y sus planes de mejora que debería realizar para superar los obstáculos surgidos. Esta autoevaluación debe indicarnos la situación de la planificación de contenidos a desarrollarse en el aula, requiere que un educador cuente con documentación adecuada y controle los logros obtenidos.
Un indicador que sirve para percibir el desempeño óptimo de un educador es a través de la opinión de autoridades educativas, aunque es notorio en muchos casos se superponen factores ajenos y criterios subjetivos a la hora de aplicar un óptimo criterio evaluativo.
No tenemos cifras exactas para estos indicadores a nivel nacional. El único documento de referencia oficial es el ENEDU 2010, publicado por el Instituto Nacional de Estadística e Investigación (INEI) en convenio con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), para seguimiento del presupuesto público 2010. Este documento presenta una muestra de 5,457 instituciones educativas y 13,189 fue el número de educadores participantes de inicial, primer y segundo año de EBR, representando el 4% respecto al número total de educadores de dicho año. La estadística no incluye los departamentos de Tumbes, Lambayeque, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, por lo que sus resultados podrían variar significativamente.
De acuerdo a los resultados de ENEDU 2010, se percibe un incremento de grados académicos de alto nivel entre los educadores hasta el año 2010. Es necesario tener en cuenta que el proceso del perfeccionamiento para estudio de maestría y doctorado son cubiertos por los mismos educadores, -salvo el caso excepcional de la Región Callao-, los gastos que demanda este tipo de perfeccionamiento son muy altos respecto a la escala salarial de los educadores.
Observando estos resultados es necesario preguntarse como logran los educadores con exiguos salarios obtener grados académicos que sólo se reconoce con un pago aproximado de 46.15 $USD y que la nueva ley magisterial ya no reconoce como bonificación.
Para mejor idea del desempeño de los educadores de inicial, primer y segundo grado de EBR, ENEDU 2010 muestra un análisis de indicadores de acompañamiento pedagógico en el marco del Programa Estratégico Logros de Aprendizaje (PELA). El concepto de “acompañamiento pedagógico” es definido como: “brindar retroalimentación y soporte técnico, promueve su reflexión continua y la mejora permanente de sus desempeños, construyendo vínculos afectivos de cooperación mutua, apoyo solidario y estableciendo relaciones amistosas, de respeto y confianza entre acompañante y acompañado”. Esta definición indica que los aspectos pedagógicos tratados durante el acompañamiento han sido: Programación curricular, Clima en el aula, estrategias de enseñanza–aprendizaje de Comunicación, estrategias de enseñanza–aprendizaje de Matemática.
6 Principios de concepto de aprendizaje conectado
1. El poder de los intereses
El interés es el catalizador para ganar conocimiento y experiencia. Diferentes investigaciones han demostrado en repetidas ocasiones que cuando el tema es personalmente interesante y relevante, los alumnos obtienen resultados y rendimientos escolares de orden superior. El aprendizaje conectado hace énfasis en los intereses y pasiones que se desarrollan alrededor de un contexto social considerándolos elementos esenciales.
2. Enfocado en la Producción
Los premios en el aprendizaje conectado vienen de la producción activa, de crear, experimentar y diseñar; promoviendo habilidades y predisponiendo el aprendizaje permanente, de tal manera que se generan contribuciones significativas a la rápida evolución del trabajo y de las condiciones sociales del mundo de hoy.
3. Cultura de Pares
En el aprendizaje conectado, se desarrolla una ecología social significativa y rica en conocimientos de continua participación, de libre expresión y reconocimiento. En sus intercambios cotidianos con sus compañeros y amigos, los jóvenes contribuyen de manera fluída, comparten unos con otros y se retroalimentan. Tomando en cuenta la característcas de los medios sociales en Internet, la cultura de pares puede producir aprendizajes atractivos y de gran alcance.
4. Propósito compartido
Hoy en día los medios sociales en Internet y las comunidades basadas en la web, ofrecen oportunidades sin precedentes para adultos, profesores, padres y alumnos por las casi ilimitadas posibilidades para compartir intereses y contribuir con un objetivo común. En este sentido, el potencial del aprendizaje intergeneracional puede verse altamente potenciado si se enfoca en objetivos comunes.
5. Orientación académica
El aprendizaje conectado reconoce la importancia del éxito académico para el crecimiento intelectual así como para alcanzar oportunidades de carácter económico y político. Cuando los estudios académicos y las instituciones se conectan a la cultura de pares de los jóvenes, la comunidad y sus intereses se ven impulsadas por estudiantes que toman conciencia de su verdadero potencial.
6. Abiertamente-Interconectados
Los ambientes de aprendizaje conectados vinculan el aprendizaje en la escuela, el hogar y la comunidad, en vista que los alumnos obtienen más y mejores logros cuando su aprendizaje es reforzado y apoyado por medio de múltiples escenarios. Las plataformas en línea pueden hacer que los abundantes recursos de aprendizaje que circulan en la red, sean accesibles y visibles en casi todos los ámbitos donde se desenvuelve el alumno.
lunes, 29 de diciembre de 2014
El futuro de nuestra educación.
Somos un país en crecimiento económico, rico en biodiversidad y diversidad cultural, habitado por gente tenaz, perseverante y creativa. Tenemos el potencial humano necesario para afrontar sus desafíos históricos y lograr un desarrollo sostenible redistribuyendo equitativamente la riqueza, fortalecer la democracia y el ejercicio pleno de la ciudadanía, superando exclusiones y desigualdades, así como para construir un Estado eficiente y transparente al servicio de todos.
Para desarrollar este potencial necesitamos formar personas capaces de enfrentar las adversidades y retos en los diversos contextos de nuestro territorio y sobretodo en una sociedad del conocimiento en continuo cambio. Esta formación tiene que darse a lo largo de la vida, convirtiendo la etapa escolar en una oportunidad para desarrollar ese potencial a sus más altos niveles.
El Ministerio de Educación trabaja para que el sistema escolar se oriente en esa dirección, colocando los aprendizajes al centro de su preocupación, dotando a las escuelas de material educativo de calidad, pertinente a la diversidad cultural y lingüística, involucrando a los padres de familia como socios principales, priorizando las necesidades de las escuelas más pobres, y desarrollando en docentes y directores las competencias requeridas.
La nueva política curricular busca consolidar un camino, iniciado hace varias décadas, para dejar atrás una enseñanza memorística y repetitiva. Se propone avanzar al logro de ocho aprendizajes fundame
Los niños, adolescentes y jóvenes peruanos necesitan aprender a lo largo de su educación básica las competencias necesarias para crecer como personas, desarrollarse a sí mismos y desenvolverse bien en el complejo mundo de hoy, así como para alcanzar las metas que se propongan como personas y como país.
Saber moverse en los distintos escenarios que ofrece el país y afrontar los desafíos que el siglo XXI plantea a su vida personal, social, ciudadana, laboral e intelectual, exige a las actuales generaciones lograr cuando menos ocho aprendizajes fundamentales.
En cualquier ámbito en que se desenvuelvan, las generaciones de hoy requieren aprender a actuar e interactuar con otros demostrando autoestima y autonomía, a favor del propio bienestar físico y emocional. Además, necesitan aprovechar las oportunidades demostrando emprendimiento; así como cuidar su cuerpo a través del ejercicio físico y adecuadas prácticas de salud y nutrición a lo largo de la vida.
También deben ejercer de manera plena su ciudadanía, mostrando que saben convivir, participar, deliberar y actuar con responsabilidad por el bien común. Todo ello reforzado por competencias que les ayude a comprender su presente desde una mirada histórica, espacial y ambiental, así como económica.
Asimismo, tienen que aprender a comunicarse eficazmente a través de distintos lenguajes, una competencia indispensable para su desarrollo personal y la convivencia social. No es menos importante que logren expresarse artísticamente
A cualquier edad, el aprendizaje es un cambio relativamente permanente en el comportamiento, el pensamiento o los afectos de toda persona, a consecuencia de la experiencia y de su interacción consciente con el entorno en que vive o con otras personas. Desde la infancia hasta la madurez, tenemos la aptitud de registrar, analizar, razonar y valorar nuestras experiencias, convirtiendo nuestras percepciones y deducciones en conocimiento.
Niños, adolescentes, jóvenes y adultos aprendemos siempre de ese modo y lo hacemos a partir de nuestras propias posibilidades, de los saberes que hemos cosechado previamente en nuestra experiencia del mundo y de nuestras emociones. Nuestra identidad y nuestra cosecha representan los filtros a través de los cuales seleccionamos, valoramos e incorporamos cada experiencia, convirtiéndola en aprendizaje.
Estos filtros que nos permiten seleccionar nuestras experiencias y traducirlas en conocimiento, son distintos a cada edad y también en cada sociedad, cultura y época. Es natural que las personas varíen su forma de ver y valorar las cosas según el contexto en el que se encuentren o según el tiempo y el lugar en que hayan nacido. Es la razón porque dos personas pueden tener apreciaciones distintas sobre los mismos hechos y obtener aprendizajes diferentes de la misma experiencia.
Nuestra propia trayectoria y personalidad, nuestros afectos y preferencias, son también filtros importantes, que influyen en nuestra manera de razonar y valorar nuestras expectativas.
En edades tempranas, el aprendizaje depende esencialmente de la experiencia directa y sensorial de los niños con sus entornos, los objetos y las personas, una vivencia siempre filtrada y traducida desde la particular forma de ver el mundo de cada uno, en el contexto de su cultura y las influencias de su medio.
No obstante, no todos los niños perciben, registran y se relacionan con sus experiencias de la misma manera, pues los seres humanos venimos al mundo con sensibilidades distintas respecto de los diversos estímulos de la realidad. Algunos tienen mayor receptividad a estímulos sociales y se activan mentalmente con mayor rapidez en la interacción con otras personas. A otros le ocurre lo mismo con estímulos sonoros, otros con la palabra, otros con su propia emocionalidad y estados de conciencia, otros con el movimiento del cuerpo, otros en interacción con formas, espacios y relaciones. Así es de variada la inteligencia humana.
Así, la educación inicial debe ofrecer a los niños oportunidades de aprendizaje sumamente variadas y de carácter multisensorial, que aprovechen su curiosidad natural y su afán investigador, permitiéndole a la vez aprender desde su propio estilo, desde sus propias posibilidades de producir conocimiento sobre el mundo y de generar habilidades para moverse en él.
A partir de los seis años, los niños pueden representar mejor la realidad y por lo tanto están en condiciones de intermediar su relación con ella a través de abstracciones. No obstante, la experiencia directa va a seguir siendo un factor de gran importancia para ampliar las posibilidades de volver más significativo un determinado aprendizaje.
En este periodo de la vida, los niños ya han definido un estilo de aprendizaje y su preferencia por determinado tipo de estímulos y experiencias que se hace más notoria. Siendo que el estilo tradicional de la enseñanza escolar privilegia la oralidad, la escritura y el sedentarismo, no tomar en cuenta la diversidad de formas de conocer y aprender supone favorecer las posibilidades de algunos y perjudicar la de otros. Los estilos que no implican el uso del razonamiento lógico y la palabra suponen una inteligencia distinta, no disminuida, y necesitan también oportunidades de aprendizaje pertinentes a sus propios códigos y fortalezas.
Durante este periodo, la curiosidad sigue siendo una característica básica, tanto como la necesidad de comunicarse, de interactuar y de entrar en acción. Las actividades pedagógicas que sepan aprovechar esta forma de relacionarse con el mundo pueden despertar en los niños interés y compromiso con sus desafíos de aprendizaje.
Hacia el fin de la primaria e inicios de la secundaria, la capacidad de pensar de los estudiantes ha madurado significativamente, lo que se empieza a notar en la manera como atienden, reconocen, codifican y almacenan la información en su memoria, para recuperarla después. A esta edad están en mejores condiciones de reflexionar objetivamente sobre esas operaciones mentales y de identificar la mejor forma de utilizarlas conscientemente para lograr una meta de aprendizaje.
De este modo, pueden elegir la estrategia más útil en cada caso para dirigir sus esfuerzos, supervisar su proceso y autorregular su actividad intelectual. Es la experiencia previa de aprendizaje la que le permite evaluar las estrategias empleadas y seleccionarla con más acierto.
Los adolescentes pueden reconocer mejor sus saberes previos y diferenciarlos de los nuevos conocimientos o habilidades que le proponen aprender y formarse una opinión sobre lo que está aprendiendo. Esto es lo que les permitiría aprender a aprender, formarse como personas que saben lo que saben, cómo lo saben y el valor que tiene ese saber.
Un medio importante que aporta mucho al aprendizaje escolar a cualquier edad son los materiales educativos, los cuales pueden ser definidos como recursos o herramientas pedagógicas cuyo propósito es facilitar el proceso de enseñar y aprender. Bien utilizados, complementan y fortalecen la práctica del docente, facilitando la implementación del currículo, dentro de un enfoque pedagógico que otorga protagonismo al estudiante en su proceso formativo y exige de él una mente permanentemente activa, reflexiva y crítica.
Estos recursos pueden ser materiales impresos, concretos, audiovisuales, tecnológicos o digitales. Si ayudan en el aprendizaje es porque motivan el interés de los estudiantes, los orientan y les sirven de apoyo en su proceso de descubrimiento, reflexión y elaboración autónoma de ideas, sea que los utilicen solos o en interacción colaborativa con otros estudiantes.
Un objeto cualquiera puede convertirse en material educativo si cumple un objetivo o función pedagógica, aun cuando no haya sido diseñado específicamente para tal fin. Algunos sirven de apoyo al desarrollo de competencias a lo largo del tiempo, como los textos escolares, los cuadernos de trabajo, las bibliotecas escolares, los materiales de psicomotricidad, etc. Otros facilitan el desarrollo de capacidades específicas, de logro más inmediato, como las letras móviles, ábacos, bloques lógicos, geoplanos, maquetas de ciencias, etc.
Hay materiales educativos que contribuyen a generar oportunidades para nuevo aprendizaje.
Los espacios donde pueden lograrse aprendizajes valiosos de toda índole, tanto en la infancia como en la adolescencia y juventud o en la vida adulta, no son sólo los delimitados por las cuatro paredes del aula y de la escuela. Todas las experiencias de vida de los estudiantes, sean fuera o dentro de la escuela, al interior de las actividades familiares, sociales, productivas o culturales típicas de la localidad, pueden ser una fuente importante de aprendizajes si es que se vuelven objeto de reflexión y análisis, motivando la generación de conocimientos nuevos.
A toda edad los estudiantes se mueven en distintos escenarios y afrontan variadas situaciones que suponen dilemas o desafíos, los cuales necesitan entender y responder apelando a todo lo que saben y a los medios que tienen disponibles. Además, se proponen objetivos de diversa naturaleza, sea que se trate de conseguir prestado el juguete de su amigo, de evitar que sus hermanos pequeños se hagan daño cuando están solos, de preparar alimentos en casa en ausencia de la madre o de hacer las compras del mercado sin olvidar nada y regresar con el vuelto exacto.
En estas u otras situaciones, de acuerdo a su edad y a su grado de maduración, no sólo registran valiosa información sobre su familia o su localidad, sino que ponen en juego diversas habilidades y aplican conocimientos aprendidos en otros contextos para ensayar soluciones.
Estas experiencias, aprovechadas pedagógicamente, pueden propiciar aprendizajes diversos y pertinentes.
Por qué es mejor leer un libro de papel que uno electrónico antes de dormir
Si eres de los que se acurrucan en la cama con un libro electrónico para una buena sesión de lectura antes de dormir, podrías estár dañando tu patrón de sueño y en consecuencia tu salud. Si puedes, mejor agarra un libro tradicional, aunque te parezca un rollo eso de pasar hojas… Esa es la advertencia que acaba de hacer un equipo de investigación de la escuela médica de Harvard, en Estados Unidos.
Encontraron que las personas que utilizan libros electrónicos con luz integrada o retroiluminados tardan más en dormir, lo cual deriva en una peor calidad del sueño durante la noche y en un mayor cansancio por la mañana. El hallazgo no sólo se aplica en el caso de los libros electrónicos sino también en computadoras, tabletas y celulares, que producen una luz similar. La clave está en lo que se denomina “luz azul”, el tono con el que percibimos la longitud de onda de la iluminación de los dispositivos electrónicos y las pantallas LED.
Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista especializadaProceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). El problema de la “luz azul” Según expertos, la gente debería minimizar la exposición a esta luz durante las horas antes de acostarse. Nuestros cuerpos están sintonizados con el ritmo del día y la noche mediante un reloj interno que se guía por el ciclo de luz y oscuridad del planeta. Pero la luz azul puede desorientar ese reloj: su presencia hacia el final de la tarde puede desacelerar o interrumpir el proceso de producción de melatonina, una hormona que responde a los cambios en la iluminación ambiental. Los niveles de melatonina varían mucho a lo largo del día. Cuando el cuerpo libera melatonina, hacia la noche, uno empieza a sentir ganas de dormir. Los niveles de melatonina también actúan como un despertador natural, que es lo que nos desorienta cuando viajamos entre diferente zonas horarias y nos provoca el jetlag. Si los niveles de melatonina son bajos cuando nos acostamos, aún cuando estémos muy cansados será imposible dormir. Lea también: cinco claves para usar la luz a nuestro favor y dormir mejor La investigación Para la investigación del equipo de Harvard, 12 personas estuvieron dos semanas encerradas en un laboratorio de estudio de sueño. Pasaron cinco días leyendo libros de bolsillo y cinco días leyendo en una tableta iPad. Los investigadores hicieron análisis de sangre regulares que demostraron una reducción en la producción de melatonina cuando leían libros electrónicos. También les tomaba más tiempo quedarse dormidos, dormían menos profundamente y estaban más cansados a la mañana siguiente. Lea también: la “arrogancia” de ignorar la necesidad de dormir Luz “directa al ojo” Según la doctora Revell deberíamos minimizar el uso de estos dispositivos al atardecer, particularmente los adolescentes, que usan sus celulares y tabletas hasta tarde. El problema según Charles Czeisler, que lideró el equipo de investigación, es que “la luz emitida por la mayoría de los dispositivos de lectura electrónica brilla directamente hacia los ojos del lector, mientras que desde el libro impreso o el Kindle original, el lector sólo está expuesto a la luz reflejada de las páginas del libro”. Según dijo Czeisler a la BBC, la perturbación del sueño tiene efectos sobre la salud. “Se ha demostrado que la deficiencia de sueño aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, enfermedades metabólicas como la obesidad y la diabetes, y de cáncer”, dijo. “Por eso nos preocupa la supresión de melatonina que observamos entre los participantes de este estudio, cuando leían en dispositivos electrónicos con luz integrada”, concluyó. La doctora Victoria Revell, que no participó en el estudio pero investiga el impacto de la luz sobre el cuerpo en la universidad inglesa de Surrey, le dijo a la BBC que se trata de unos resultados muy interesantes. “Deberíamos recomendarle a la gente que minimice el uso de estos dispositivos al atardecer, particularmente a los adolescentes, que usan sus celulares y tabletas hasta tarde”, dijo. Los adolescentes tienen naturalmente un reloj biológico “retrasado”, lo que hace que les cueste levantarse por la mañana y se duerman tarde por la noche. Según Revell, la práctica de leer con dispositivos con luz integrada antes de acostarse podría estar retrasando ese reloj mucho más. El investigador Czeisler concuerda en que hay una “preocupación especial” por los adolescentes, que ya tienen privación del sueño por tener que levantarse temprano para ir al colegio.