martes, 30 de diciembre de 2014

La Educacion en el Peru

“En el Perú existe una gran oferta laboral docente muy importante, Según el Censo Escolar último, el Estado peruano emplea a 324,995 educadores, aunque los índices de oferta del empleo muestra que existe un 10% (58,281) de educadores desempleados. El presente año 2013 el Ministerio de Educación ha presupuestado  51,000 plazas de contrato a nivel nacional.
El acelerado crecimiento de instituciones educativas privadas en ciudades de la costa peruana ha elevado el empleo de los educadores, representando el 28% (171,200) con respeto a docentes nombrados en el Estado. La oferta de empleo de educadores para escuelas privadas muestra el modelo económico que experimenta nuestro país; El Estado renuncia progresivamente a proporcionar educación de calidad a la población, se incentiva que sean inversionistas privados quienes se encarguen de una responsabilidad que les compete exclusivamente.
La selección y acceso laboral de los educadores muestra conflictos durante la competencia entre profesionales y normalistas egresados de institutos pedagógicos; además de la inclusión de profesionales que no han sido formados como educadores. Los últimos concursos de nombramiento y contratos aún muestran la equivocada percepción de funcionarios del Ministerio de Educación de elaborar pruebas de conocimientos generales en la creencia que esto acredita la calidad profesional de los educadores. En realidad omiten el nivel de experiencia y productividad que posee un educador. Este tipo de concurso ha detenido en parte  el clientelaje político que caracterizaba la obtención de empleo en Educación, bastaba con presentar el carnet partidario para obtener nombramiento sin haber pisado un aula universitaria”

 SALARIO DE LOS EDUCADORES EN PERÚ.
El Estado Peruano a través del Ministerio de Educación, -como órgano intermedio-, asignó el año anterior un Presupuesto Institucional Modificado (PIM) para el sector de s/17,189.300, lo que representa un 3.31% en referencia al Producto Bruto Interno para el año 2012. Este porcentual es el aproximado a lo que se ha venido asignando en los últimos seis años (ver cuadro 01), sin embargo, en el mayor de los casos solo se ejecutan en un aproximado del 85%, lo que en realidad indica que el Presupuesto real en Educación sólo se ejecuta en 2.78%.
La UNESCO sugiere que para mejorar la calidad educativa en el mundo, cada país debe invertir no menos del 6% de su Producto Bruto Interno (PBI). El Perú, -según el informe de la Comisión económica para América Latina (CEPAL)-, es una de las naciones en Latinoamérica con menor presupuesto educativo. En el gráfico 03 puede observarse las líneas de tendencia entre PBI y presupuesto educativo: mientras el PBI indica crecimiento sostenido, en cambio el presupuesto educativo se ha mantenido en 3%. Diferentes gobiernos en Perú se comprometieron a cumplir con el incremento al 6% en el presupuesto general de la república en un plazo mediano, aún no se ha cumplido dicha meta presupuestal.
El exiguo presupuesto también se refleja en el salario de los educadores. A excepción del gobierno de Alejandro Toledo, quien duplicó el sueldo, los demás gobiernos han supeditado los incrementos salariales al condicionamiento de una ley magisterial aprobada recientemente.

El salario de los educadores en Perú es diferenciado, varía según el tipo y nivel  y la jornada laboral, es decir, existe un salario escalonado en el educador de nivel superior en cualquiera de sus formas, así como en educadores de Educación Básica Regular (EBR). Teniendo en cuenta que los educadores de EBR representan el mayor porcentaje laboral en nuestro país (ver cuadro) no existe pirámide salarial, sino una base muy ancha respecto a renumeración privilegiada que perciben un porcentaje muy bajo de educadores.
Bajo la nueva ley de educación los docentes de Educación Básica Regular en el primer nivel y con una jornada laboral de 24 horas perciben un salario promedio de 1,243.39 soles (478.22 USD), la cual va ascendiendo paulatinamente en un promedio de 100, 150 y 200 soles hasta el octavo nivel. Este sueldo resulta reducido comparado con el monto oficial de la canasta básica familiar que es de 2,240.00 soles (861.54 USD). Este salario es percibido por la mayoría de educadores y representa sólo el 55.50% de la canasta básica, muestra la insuficiente capacidad adquisitiva de un educador. Además, si se agrega el gran porcentaje de educadores que laboran en el sector privado y sus salarios representan sólo el 31.25 % de la dicha canasta familiar.
Ante tal situación salarial, las huelgas magisteriales son frecuentes y reiteran una justa demanda por el incremento salarial. Los reclamos de los educadores son tratados por cada gobernante como “conflictos superables” que se aplacan con pequeñas dádivas, -usualmente bonos económicos,- como pago por única vez. Desencadenada una huelga esta es aprovechada por gobernantes y funcionarios de educación para culpar a los educadores por la baja calidad educativa o por las consecuencias de dichas huelgas, donde se perjudica a los discentes.
A fin de atenuar necesidades vitales y obtener una mejor calidad de vida, los educadores optan por nuevas opciones laborales; trabajos a medio tiempo que puedan realizar fuera de sus horarios laborales, perdiendo la función de exclusividad al trabajo docente que se requiere. Esto deja entrever una interrogante ¿En qué momento este educador prepara y planifica sus clases? Es obvio que un educador estará concentrado en solucionar primero sus necesidades básicas y después se abocará a la planificación de lecciones en el aula. Esto constituye un indicador notorio y preciso que nos permite comprender que el desenvolvimiento docente, ya sea en el aula o en la sociedad, dependerá en gran medida de una mejora de sus capacidades adquisitivas.

INDICADORES DEL DESEMPEÑO EN EL AULA
El trabajo profesional de un educador requiere una especialización que no aporta ninguna otra carrera profesional: la formación de habilidades, destrezas y virtudes para educar a sus discentes, logrando a través de ello, fines educativos que involucran factores exógenos y endógenos. El producto más delicado y con potencialidad que forma es el ser humano, su educación no puede quedar en manos de improvisados que consideran la profesión del educador como la última opción laboral.
Esto requiere evaluar la calidad del desempeño docente, de sus cualidades como educador y de los productos que va forjando en las aulas. ¿Cómo se evalúa este desempeño docente? Los resultados se observan en los procesos adecuados de aprendizajes eficientes que realiza en el aula y por sus productos que obtiene después de un proceso prolongado de formación con valores y conocimientos.
Para el primer caso, los procesos adecuados de aprendizajes eficientes se reflejan en el discente como producto de un proceso planificado desde el currículo, en su desarrollo óptimo deberá existir un compromiso dual entre educadores y discentes o sus padres, el compromiso por aprender necesita predisposición y preparación y, sobre todo, contar con condiciones materiales favorables para lograr éxito.
Existen muchos indicadores para evaluar el desempeño docente, una de ellas es el dominio profesional. La característica que evalúa es la información teórica que posee el educador, mide la capacidad informativa y de conocimientos pedagógicos, el nivel académico, y la capacidad resolutiva. Este tipo de indicador no evidencia la experiencia acumulada respecto a las destrezas personales y la estrategia didáctica que posee el educador en su desempeño dentro del aula.
Un indicador de percepción y opinión de los discentes sobre el trabajo del educador en el aula suele ser relativo al momento de aplicarse, requiere de un nuevo modelo educativo, una práctica de libertad participativa y madurez del discente. Sus criterios evaluativos resultarían objetivos si tuvieran un adecuado manejo de los instrumentos de evaluación. Siempre existe riesgo que las evaluaciones de los discentes respecto a los educadores prevalezcan factores subjetivos y surjan condicionamientos de diversa índole.
La autoevaluación proveniente del educador es un indicador de conciencia frente a los resultados de su desempeño en el aula, resulta interesante saber como considera cada uno los avatares del propio desempeño en el aula y sus planes de mejora que debería realizar para superar los obstáculos surgidos. Esta autoevaluación debe indicarnos la situación de la planificación de contenidos a desarrollarse en el aula, requiere que un educador cuente con documentación adecuada y controle los logros obtenidos.
Un indicador que sirve para percibir el desempeño óptimo de un educador es a través de la opinión de autoridades educativas, aunque es notorio en muchos casos se superponen factores ajenos y criterios subjetivos a la hora de aplicar un óptimo criterio evaluativo.
No tenemos cifras exactas para estos indicadores a nivel nacional. El único documento de referencia oficial es el ENEDU 2010, publicado por el Instituto Nacional de Estadística e Investigación (INEI) en convenio con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), para seguimiento del presupuesto público 2010. Este documento presenta una muestra de 5,457 instituciones educativas y 13,189 fue el número de educadores participantes de inicial, primer y segundo año de EBR, representando el 4% respecto al número total de educadores de dicho año. La estadística no incluye los departamentos de Tumbes, Lambayeque, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, por lo que sus resultados podrían variar significativamente.
De acuerdo a los resultados de ENEDU 2010, se percibe un incremento de grados académicos de alto nivel entre los educadores hasta el año 2010. Es necesario tener en cuenta que el proceso del perfeccionamiento para estudio de maestría y doctorado son cubiertos por los mismos educadores, -salvo el caso excepcional de la Región Callao-, los gastos que demanda este tipo de perfeccionamiento son muy altos respecto a la escala salarial de los educadores.
Observando estos resultados es necesario preguntarse como logran los educadores con exiguos salarios obtener grados académicos que sólo se reconoce con un pago aproximado de 46.15 $USD y que la nueva ley magisterial ya no reconoce como bonificación.
Para mejor idea del desempeño de los educadores de inicial, primer y segundo grado de EBR, ENEDU 2010 muestra un análisis de indicadores de acompañamiento pedagógico en el marco del Programa Estratégico Logros de Aprendizaje (PELA). El concepto de “acompañamiento pedagógico” es definido como: “brindar retroalimentación y soporte técnico, promueve su reflexión continua y la mejora permanente de sus desempeños, construyendo vínculos afectivos de cooperación mutua, apoyo solidario y estableciendo relaciones amistosas, de respeto y confianza entre acompañante y acompañado”. Esta definición indica que los aspectos pedagógicos tratados durante el acompañamiento han sido: Programación curricular, Clima en el aula, estrategias de enseñanza–aprendizaje de Comunicación, estrategias de enseñanza–aprendizaje de Matemática.

6 Principios de concepto de aprendizaje conectado

Durante más de un siglo, los educadores se han esforzado en personalizar la educación de los alumnos. El Aprendizaje Conectado aprovecha los avances de la era digital para hacer ese sueño una realidad, es decir, conectar intereses académicos, estudiantes, habilidades de orden superior y armonizarlas con las exigencias de la nueva economía. Los seis principios descritos a continuación, definen un paradgma que permite a los jóvenes desarrollar una experiencia de aprendizaje social, participativo, y de interés relevante impulsado por las oportunidades de nuestro tiempo.
1. El poder de los intereses
 El interés es el catalizador para ganar conocimiento y experiencia. Diferentes investigaciones han demostrado en repetidas ocasiones que cuando el tema es personalmente interesante y relevante, los alumnos obtienen resultados y rendimientos escolares de orden superior. El aprendizaje conectado hace énfasis en los intereses y pasiones que se desarrollan alrededor de un contexto social considerándolos elementos esenciales.
2. Enfocado en la Producción
 Los premios en el aprendizaje conectado vienen de la producción activa, de crear, experimentar y diseñar; promoviendo habilidades y predisponiendo el aprendizaje permanente, de tal manera que se generan contribuciones significativas a la rápida evolución del trabajo y de las condiciones sociales del mundo de hoy.
3. Cultura de Pares
 En el aprendizaje conectado, se desarrolla una ecología social significativa y rica en conocimientos de continua participación, de libre expresión y reconocimiento. En sus intercambios cotidianos con sus compañeros y amigos, los jóvenes contribuyen de manera fluída, comparten unos con otros y se retroalimentan. Tomando en cuenta la característcas de los medios sociales en Internet, la cultura de pares puede producir aprendizajes atractivos y de gran alcance.
4. Propósito compartido
 Hoy en día los medios sociales en Internet y las comunidades basadas en la web, ofrecen oportunidades sin precedentes para adultos, profesores, padres y alumnos por las casi ilimitadas posibilidades para compartir intereses y contribuir con un objetivo común. En este sentido, el potencial del aprendizaje intergeneracional puede verse altamente potenciado si se enfoca en objetivos comunes.
5. Orientación académica
 El aprendizaje conectado reconoce la importancia del éxito académico para el crecimiento intelectual así como para alcanzar oportunidades de carácter económico y político. Cuando los estudios académicos y las instituciones se conectan a la cultura de pares de los jóvenes, la comunidad y sus intereses se ven impulsadas por estudiantes que toman conciencia de su verdadero potencial.
6. Abiertamente-Interconectados
 Los ambientes de aprendizaje conectados vinculan el aprendizaje en la escuela, el hogar y la comunidad, en vista que los alumnos obtienen más y mejores logros cuando su aprendizaje es reforzado y apoyado por medio de múltiples escenarios. Las plataformas en línea pueden hacer que los abundantes recursos de aprendizaje que circulan en la red, sean accesibles y visibles en casi todos los ámbitos donde se desenvuelve el alumno.

lunes, 29 de diciembre de 2014

El futuro de nuestra educación.

Somos un país en crecimiento económico, rico en biodiversidad y diversidad cultural, habitado por gente tenaz, perseverante y creativa. Tenemos el potencial humano necesario para afrontar sus desafíos históricos y lograr un desarrollo sostenible redistribuyendo equitativamente la riqueza, fortalecer la democracia y el ejercicio pleno de la ciudadanía, superando exclusiones y desigualdades, así como para construir un Estado eficiente y transparente al servicio de todos.

Para desarrollar este potencial necesitamos formar personas capaces de enfrentar las adversidades y retos en los diversos contextos de nuestro territorio y sobretodo en una sociedad del conocimiento en continuo cambio. Esta formación tiene que darse a lo largo de la vida, convirtiendo la etapa escolar en una oportunidad para desarrollar ese potencial a sus más altos niveles.

El Ministerio de Educación trabaja para que el sistema escolar se oriente en esa dirección, colocando los aprendizajes al centro de su preocupación, dotando a las escuelas de material educativo de calidad, pertinente a la diversidad cultural y lingüística, involucrando a los padres de familia como socios principales, priorizando las necesidades de las escuelas más pobres, y desarrollando en docentes y directores las competencias requeridas.

La nueva política curricular busca consolidar un camino, iniciado hace varias décadas, para dejar atrás una enseñanza memorística y repetitiva. Se propone avanzar al logro de ocho aprendizajes fundame

Los niños, adolescentes y jóvenes peruanos necesitan aprender a lo largo de su educación básica las competencias necesarias para crecer como personas, desarrollarse a sí mismos y desenvolverse bien en el complejo mundo de hoy, así como para alcanzar las metas que se propongan como personas y como país.

Saber moverse en los distintos escenarios que ofrece el país y afrontar los desafíos que el siglo XXI plantea a su vida personal, social, ciudadana, laboral e intelectual, exige a las actuales generaciones lograr cuando menos ocho aprendizajes fundamentales.

En cualquier ámbito en que se desenvuelvan, las generaciones de hoy requieren aprender a actuar e interactuar con otros demostrando autoestima y autonomía, a favor del propio bienestar físico y emocional. Además, necesitan aprovechar las oportunidades demostrando emprendimiento; así como cuidar su cuerpo a través del ejercicio físico y adecuadas prácticas de salud y nutrición a lo largo de la vida.

También deben ejercer de manera plena su ciudadanía, mostrando que saben convivir, participar, deliberar y actuar con responsabilidad por el bien común. Todo ello reforzado por competencias que les ayude a comprender su presente desde una mirada histórica, espacial y ambiental, así como económica.

Asimismo, tienen que aprender a comunicarse eficazmente a través de distintos lenguajes, una competencia indispensable para su desarrollo personal y la convivencia social. No es menos importante que logren expresarse artísticamente

A cualquier edad, el aprendizaje es un cambio relativamente permanente en el comportamiento, el pensamiento o los afectos de toda persona, a consecuencia de la experiencia y de su interacción consciente con el entorno en que vive o con otras personas. Desde la infancia hasta la madurez, tenemos la aptitud de registrar, analizar, razonar y valorar nuestras experiencias, convirtiendo nuestras percepciones y deducciones en conocimiento.

Niños, adolescentes, jóvenes y adultos aprendemos siempre de ese modo y lo hacemos a partir de nuestras propias posibilidades, de los saberes que hemos cosechado previamente en nuestra experiencia del mundo y de nuestras emociones. Nuestra identidad y nuestra cosecha representan los filtros a través de los cuales seleccionamos, valoramos e incorporamos cada experiencia, convirtiéndola en aprendizaje.

Estos filtros que nos permiten seleccionar nuestras experiencias y traducirlas en conocimiento, son distintos a cada edad y también en cada sociedad, cultura y época. Es natural que las personas varíen su forma de ver y valorar las cosas según el contexto en el que se encuentren o según el tiempo y el lugar en que hayan nacido. Es la razón porque dos personas pueden tener apreciaciones distintas sobre los mismos hechos y obtener aprendizajes diferentes de la misma experiencia.

Nuestra propia trayectoria y personalidad, nuestros afectos y preferencias, son también filtros importantes, que influyen en nuestra manera de razonar y valorar nuestras expectativas.

En edades tempranas, el aprendizaje depende esencialmente de la experiencia directa y sensorial de los niños con sus entornos, los objetos y las personas, una vivencia siempre filtrada y traducida desde la particular forma de ver el mundo de cada uno, en el contexto de su cultura y las influencias de su medio.

No obstante, no todos los niños perciben, registran y se relacionan con sus experiencias de la misma manera, pues los seres humanos venimos al mundo con sensibilidades distintas respecto de los diversos estímulos de la realidad. Algunos tienen mayor receptividad a estímulos sociales y se activan mentalmente con mayor rapidez en la interacción con otras personas. A otros le ocurre lo mismo con estímulos sonoros, otros con la palabra, otros con su propia emocionalidad y estados de conciencia, otros con el movimiento del cuerpo, otros en interacción con formas, espacios y relaciones. Así es de variada la inteligencia humana.

Así, la educación inicial debe ofrecer a los niños oportunidades de aprendizaje sumamente variadas y de carácter multisensorial, que aprovechen su curiosidad natural y su afán investigador, permitiéndole a la vez aprender desde su propio estilo, desde sus propias posibilidades de producir conocimiento sobre el mundo y de generar habilidades para moverse en él.

A partir de los seis años, los niños pueden representar mejor la realidad y por lo tanto están en condiciones de intermediar su relación con ella a través de abstracciones. No obstante, la experiencia directa va a seguir siendo un factor de gran importancia para ampliar las posibilidades de volver más significativo un determinado aprendizaje.

En este periodo de la vida, los niños ya han definido un estilo de aprendizaje y su preferencia por determinado tipo de estímulos y experiencias que se hace más notoria. Siendo que el estilo tradicional de la enseñanza escolar privilegia la oralidad, la escritura y el sedentarismo, no tomar en cuenta la diversidad de formas de conocer y aprender supone favorecer las posibilidades de algunos y perjudicar la de otros. Los estilos que no implican el uso del razonamiento lógico y la palabra suponen una inteligencia distinta, no disminuida, y necesitan también oportunidades de aprendizaje pertinentes a sus propios códigos y fortalezas.

Durante este periodo, la curiosidad sigue siendo una característica básica, tanto como la necesidad de comunicarse, de interactuar y de entrar en acción. Las actividades pedagógicas que sepan aprovechar esta forma de relacionarse con el mundo pueden despertar en los niños interés y compromiso con sus desafíos de aprendizaje.

Hacia el fin de la primaria e inicios de la secundaria, la capacidad de pensar de los estudiantes ha madurado significativamente, lo que se empieza a notar en la manera como atienden, reconocen, codifican y almacenan la información en su memoria, para recuperarla después. A esta edad están en mejores condiciones de reflexionar objetivamente sobre esas operaciones mentales y de identificar la mejor forma de utilizarlas conscientemente para lograr una meta de aprendizaje.

De este modo, pueden elegir la estrategia más útil en cada caso para dirigir sus esfuerzos, supervisar su proceso y autorregular su actividad intelectual. Es la experiencia previa de aprendizaje la que le permite evaluar las estrategias empleadas y seleccionarla con más acierto.

Los adolescentes pueden reconocer mejor sus saberes previos y diferenciarlos de los nuevos conocimientos o habilidades que le proponen aprender y formarse una opinión sobre lo que está aprendiendo. Esto es lo que les permitiría aprender a aprender, formarse como personas que saben lo que saben, cómo lo saben y el valor que tiene ese saber.

Un medio importante que aporta mucho al aprendizaje escolar a cualquier edad son los materiales educativos, los cuales pueden ser definidos como recursos o herramientas pedagógicas cuyo propósito es facilitar el proceso de enseñar y aprender. Bien utilizados, complementan y fortalecen la práctica del docente, facilitando la implementación del currículo, dentro de un enfoque pedagógico que otorga protagonismo al estudiante en su proceso formativo y exige de él una mente permanentemente activa, reflexiva y crítica.

Estos recursos pueden ser materiales impresos, concretos, audiovisuales, tecnológicos o digitales. Si ayudan en el aprendizaje es porque motivan el interés de los estudiantes, los orientan y les sirven de apoyo en su proceso de descubrimiento, reflexión y elaboración autónoma de ideas, sea que los utilicen solos o en interacción colaborativa con otros estudiantes.

Un objeto cualquiera puede convertirse en material educativo si cumple un objetivo o función pedagógica, aun cuando no haya sido diseñado específicamente para tal fin. Algunos sirven de apoyo al desarrollo de competencias a lo largo del tiempo, como los textos escolares, los cuadernos de trabajo, las bibliotecas escolares, los materiales de psicomotricidad, etc. Otros facilitan el desarrollo de capacidades específicas, de logro más inmediato, como las letras móviles, ábacos, bloques lógicos, geoplanos, maquetas de ciencias, etc.

Hay materiales educativos que contribuyen a generar oportunidades para nuevo aprendizaje.

Los espacios donde pueden lograrse aprendizajes valiosos de toda índole, tanto en la infancia como en la adolescencia y juventud o en la vida adulta, no son sólo los delimitados por las cuatro paredes del aula y de la escuela. Todas las experiencias de vida de los estudiantes, sean fuera o dentro de la escuela, al interior de las actividades familiares, sociales, productivas o culturales típicas de la localidad, pueden ser una fuente importante de aprendizajes si es que se vuelven objeto de reflexión y análisis, motivando la generación de conocimientos nuevos.

A toda edad los estudiantes se mueven en distintos escenarios y afrontan variadas situaciones que suponen dilemas o desafíos, los cuales necesitan entender y responder apelando a todo lo que saben y a los medios que tienen disponibles. Además, se proponen objetivos de diversa naturaleza, sea que se trate de conseguir prestado el juguete de su amigo, de evitar que sus hermanos pequeños se hagan daño cuando están solos, de preparar alimentos en casa en ausencia de la madre o de hacer las compras del mercado sin olvidar nada y regresar con el vuelto exacto.

En estas u otras situaciones, de acuerdo a su edad y a su grado de maduración, no sólo registran valiosa información sobre su familia o su localidad, sino que ponen en juego diversas habilidades y aplican conocimientos aprendidos en otros contextos para ensayar soluciones.

Estas experiencias, aprovechadas pedagógicamente, pueden propiciar aprendizajes diversos y pertinentes.

Por qué es mejor leer un libro de papel que uno electrónico antes de dormir

Si eres de los que se acurrucan en la cama con un libro electrónico para una buena sesión de lectura antes de dormir, podrías estár dañando tu patrón de sueño y en consecuencia tu salud. Si puedes, mejor agarra un libro tradicional, aunque te parezca un rollo eso de pasar hojas… Esa es la advertencia que acaba de hacer un equipo de investigación de la escuela médica de Harvard, en Estados Unidos.
Encontraron que las personas que utilizan libros electrónicos con luz integrada o retroiluminados tardan más en dormir, lo cual deriva en una peor calidad del sueño durante la noche y en un mayor cansancio por la mañana. El hallazgo no sólo se aplica en el caso de los libros electrónicos sino también en computadoras, tabletas y celulares, que producen una luz similar. La clave está en lo que se denomina “luz azul”, el tono con el que percibimos la longitud de onda de la iluminación de los dispositivos electrónicos y las pantallas LED.
Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista especializadaProceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). El problema de la “luz azul” Según expertos, la gente debería minimizar la exposición a esta luz durante las horas antes de acostarse. Nuestros cuerpos están sintonizados con el ritmo del día y la noche mediante un reloj interno que se guía por el ciclo de luz y oscuridad del planeta. Pero la luz azul puede desorientar ese reloj: su presencia hacia el final de la tarde puede desacelerar o interrumpir el proceso de producción de melatonina, una hormona que responde a los cambios en la iluminación ambiental. Los niveles de melatonina varían mucho a lo largo del día. Cuando el cuerpo libera melatonina, hacia la noche, uno empieza a sentir ganas de dormir. Los niveles de melatonina también actúan como un despertador natural, que es lo que nos desorienta cuando viajamos entre diferente zonas horarias y nos provoca el jetlag. Si los niveles de melatonina son bajos cuando nos acostamos, aún cuando estémos muy cansados será imposible dormir. Lea también: cinco claves para usar la luz a nuestro favor y dormir mejor La investigación Para la investigación del equipo de Harvard, 12 personas estuvieron dos semanas encerradas en un laboratorio de estudio de sueño. Pasaron cinco días leyendo libros de bolsillo y cinco días leyendo en una tableta iPad. Los investigadores hicieron análisis de sangre regulares que demostraron una reducción en la producción de melatonina cuando leían libros electrónicos. También les tomaba más tiempo quedarse dormidos, dormían menos profundamente y estaban más cansados a la mañana siguiente. Lea también: la “arrogancia” de ignorar la necesidad de dormir Luz “directa al ojo” Según la doctora Revell deberíamos minimizar el uso de estos dispositivos al atardecer, particularmente los adolescentes, que usan sus celulares y tabletas hasta tarde. El problema según Charles Czeisler, que lideró el equipo de investigación, es que “la luz emitida por la mayoría de los dispositivos de lectura electrónica brilla directamente hacia los ojos del lector, mientras que desde el libro impreso o el Kindle original, el lector sólo está expuesto a la luz reflejada de las páginas del libro”. Según dijo Czeisler a la BBC, la perturbación del sueño tiene efectos sobre la salud. “Se ha demostrado que la deficiencia de sueño aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, enfermedades metabólicas como la obesidad y la diabetes, y de cáncer”, dijo. “Por eso nos preocupa la supresión de melatonina que observamos entre los participantes de este estudio, cuando leían en dispositivos electrónicos con luz integrada”, concluyó. La doctora Victoria Revell, que no participó en el estudio pero investiga el impacto de la luz sobre el cuerpo en la universidad inglesa de Surrey, le dijo a la BBC que se trata de unos resultados muy interesantes. “Deberíamos recomendarle a la gente que minimice el uso de estos dispositivos al atardecer, particularmente a los adolescentes, que usan sus celulares y tabletas hasta tarde”, dijo. Los adolescentes tienen naturalmente un reloj biológico “retrasado”, lo que hace que les cueste levantarse por la mañana y se duerman tarde por la noche. Según Revell, la práctica de leer con dispositivos con luz integrada antes de acostarse podría estar retrasando ese reloj mucho más. El investigador Czeisler concuerda en que hay una “preocupación especial” por los adolescentes, que ya tienen privación del sueño por tener que levantarse temprano para ir al colegio.

domingo, 28 de diciembre de 2014

MINEDU prohíbe a los colegios denominarse «Centros pre-universitarios

El Ministerio de Educación - MINEDU, indicó que la educación básica no debe concentrarse solo en aprobar un examen de admisión, sino en impartir una formación integral: El Ministerio de Educación prohibió el uso, difusión y publicidad de la denominación "centros preuniversitarios" para todos los colegios públicos y privados, bajo responsabilidad de los directores, según se establece en las Normas y Orientaciones para el Desarrollo del Año Escolar 2015 en la Educación Básica.
Dichas disposiciones prohíben además, bajo responsabilidad del director, caracterizar u ofertar la formación impartida como "preuniversitaria". Esta restricción del Ministerio de Educación responde a que el enfoque de "enseñanza preuniversitaria" que ciertos colegios adoptan y publicitan se contrapone con el modelo pedagógico que actualmente se aplica en la educación básica regular.
Se considera que la educación básica no debe concentrarse solo en aprobar un examen de admisión a la universidad y alcanzar una vacante, sino en impartir una formación integral que, junto con los conocimientos académicos, contemple la cultura general y los valores morales. En el ámbito de educación secundaria, las Normas y Orientaciones 2015 del Ministerio de Educación establecen la ampliación de la jornada laboral de los profesores en dos horas (de 24 a 26 horas semanales), lo que implica permanencia en la institución educativa.

Ranking Mejores Universidades del Perú

La revista América Economía ha elaborado un ranking donde de muestra una lista de las 14 mejores universidades del Perú en el 2014, el cual es liderado, una vez más, por la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP): La publicación de este ranking tomó en cuenta diveros factores, como la percepción de calidad docente (25%), investigación (25%), internacionalización (10%), empleabilidad (15%), acreditación (10%), infraestructura (5%), selectividad académica (5%) e inclusión (5%).
Es así que la Católica continúa liderando este ranking, seguida por la Universidad Cayetano Heredia, la cual mantiene el segundo lugar obtenido en el ranking del 2012 y 2013. Por su parte, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos es la única institución estatal que aparece en este listado. Tal como años anteriores, la Decana de América continúa en el tercer puesto. En tanto, la Universidad del Pacifico escaló un puesto, pasando del quinto al cuarto lugar, superando a la Universidad de Lima que ahora la quinta casilla, mientras que la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) sigue escalando posiciones. En el 2012, ocupaba el decimotercer puesto, un año después llegó al noveno lugar y hoy figura en el puesto 6. Similar situación presenta la universidad de Piura, la cual escaló tres posiciones en referencia al año pasado, llegando al séptimo lugar. Cabe anotar que 10 puestos subió la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL), pasando del decimoctavo lugar al octavo. ESAN también subió varios puestos a diferencia del año pasado en el que ocupó el puesto 16, ahora figura en el noveno lugar. Completa el top 10 la Universidad Ricardo Palma, que en el 2013 ocupó el decimoquinto lugar. Las otras cuatro universidades que forman parte del ranking son la Universidad Científica del Sur (48° en el 2013), la Universidad Ruiz de Montoya (50° en el 2013), la Universidad Continental y la Universidad Privada del Norte (UPN).
Ranking de las mejores universidades del Perú 2014 1:
1. Universidad Católica del Perú
2. Universidad Cayetano Heredia
3. Universidad Nacional Mayor de San Marcos
4. Universidad del Pacífico
5. Universidad de Lima
6. Universidad de Piura
7. Universidad San Ignacio de Loyola
8. ESAN
9. Universidad Ricardo Palma
10. Universidad Científica del Sur
11. Universidad Ruiz de Montoya
12. Universidad Continental
13. Universidad Privada del Norte

La industria de los profesores particulares

Me ha asombrado la gran cantidad de padres de familia que conozco de varios colegios particulares me comentan que el colegio al que asisten sus hijos plantea tales niveles de exigencia, tanto en idioma extranjero como en matemáticas y otras áreas, que la única manera de sus hijos para sobrevivir en el colegio y evitar los desaprobados (y eventual repitencia o expulsión del colegio) es contar con profesores particulares. Hay un ejército de profesores particulares de inglés, matemáticas, etc., que llenan las jornadas pos escolares, agotan a los alumnos y desgastan económica y emocionalmente a los propios padres, para quienes la vida escolar de sus hijos es un factor de constante estrés. En buena cuenta, deben hacer en casa por su cuenta aquello para lo cual han matriculado a sus hijos en los colegios. ¿Tiene sentido todo eso? Por otro lado, ¿sorprende que los alumnos ?odien? ir a su colegio? En buena cuenta los colegios, y en muchos casos cada profesor que se encuentra con los padres para hacerles recomendaciones para que sus hijos mejoren en el colegio, se han convertido en brokers de profesores, psicólogos y centros de atención especial (sin contar los que recomiendan medicación para anestesiar a los niños inquietos). Por si fuera poco, cada uno tiene sus profesores o terapeutas recomendados, con lo que se concreta una especie de subsistema escolar particular que sustituye las falencias del original. Me sorprende, además, que tantos padres sientan que no se puede hacer nada al respecto.