Pasamos más de la mitad de nuestra vida trabajando, valdría la pena preguntarse cómo ser feliz en nuestro trabajo porque, además, la felicidad en el trabajo influye en la felicidad fuera del trabajo. La semana pasada exactamente el jueves 4 de agosto fui a una conferencia sobre Educacion en Chosica, y ahí conocí a Mireya una profesora del nivel de Inicial realmente una mujer fuera de serie. Conversábamos sobre cuán decisivo es el sueldo en la felicidad. Me decía que efectivamente es un factor importante el hecho de tener una retribución justa, sin embargo no necesariamente es el disparador principal. Incluso podría ser lo contrario si pensamos que en el mismo sector educativo se está pagando más por hacer lo mismo.
Más allá de las gratificaciones, lo más importante en el trabajo que tenemos me decia, es el compromiso y la satisfacción que nos produce sentir que estamos contribuyendo a algo importante, que ayuda al crecimiento de la Educación de los niños y niñas y que mejoren su calidad de vida.
Para ser felices en el trabajo podemos comenzar con aceptar la realidad y a los demás tal como son. Conocernos y aceptarnos a nosotros y a nuestros equipos con sus fortalezas y debilidades.
Tener expectativas realistas y adecuadas sobre el trabajo y quiénes nos rodean. En vez de exigir a las circunstancias y a los demás que se amolden a nuestros deseos, aceptarlos tal como son y, a partir de ahí, modificar aquello que se puede mejorar. No hacerlo será una fuente segura de decepción y desmotivación. La felicidad laboral del docente está en valorar lo que tenemos y no frustrarnos por lo que nos falta. Ojo, con eso no quiero decir que seamos mediocres, para nada, siempre, con las ganas y el esfuerzo de aprender y mejorar. Lo único que vale la pena hacer es lo que haces por otros. Mireya me decía : ¨Quieres un secreto para ser feliz? Date y sirve a los demás sin esperar que te lo agradezcan.
La gestión de la felicidad implica necesariamente que vivamos con un propósito en la vida (y por ende en el trabajo) y que disfrutemos de lo que hacemos y hagamos que los que están a cargo nuestro lo disfruten. Me decia tambien que quizás el mejor trabajo no sea aquel en el que la IE donde trabajemos sea la mejor pagadora, o la más grande o la que más facture, sino en el que las personas tengan la sensación de estar donde quieren estar. Y esto pasa por ganar la cabeza y el corazón de tu equipo de trabajo. Con la cabeza se refiere a que reciban un salario justo y con el corazón a que se les escuche, se les entienda y se les valore. Piénsalo bien, analiza, ¿Qué tan buen profesor eres? ¿Qué te encanta hacer como profesor? ¿Qué puedes hacer para que tus estudiantes disfruten y mejoren más en sus aprendizajes?
domingo, 7 de agosto de 2016
¿Mi trabajo me puede hacer feliz?
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