En educación se produce siempre este principio: «no se puede no aprender». Esto sirve para todas las situaciones de aprendizaje, es decir, para todas las situaciones del ser humano. En cada una de ellas se aprende, es una oportunidad de aprender o se bloquea el aprendizaje, pero en cualquier caso hay un aprendizaje. Podemos decir que hay una aprendizaje positivo o negativo para la persona, pero aprendizaje hay siempre. Evidentemente se trata de un principio que deben tener en cuenta los profesores, la educación en general: no se puede no aprender. No se puede no enseñar. El alumno aprende del profesor y el profesor aprende del alumno. El profesor enseña al alumno y el alumno al profesor. Y se puede también poner a la inversa: si el profesor no aprende, los alumnos tampoco. Suena un poco radical, pero es así. Además debido a que la escuela es una institución dedicada precisamente a la enseñanza sus mensajes tienen una autoridad especial y debido a ello, se quiera o no, van a quedar especialmente grabados en los alumnos. La autoridad es un fenómeno de la comunicación humana que influye poderosamente. Si a esto se le suma que los alumnos son menores de edad y por tanto también desde un punto de vista biológico y psicológico especialmente abiertos al aprendizaje, tenemos reforzado el principio y en la escuela de modo especial: no se puede no aprender, Si el planteamiento de un centro es o pretende ser, por ejemplo, solo académica y piensa que los niños deben venir educados de casa, precisamente con esa postura está enseñando a sus alumnos, unos valores determinados: que lo académico es lo importante y que lo personal debe ser relegado en la vida social, laboral, etc. En cualquier caso se está enseñando algo. Si se renuncia a enseñar, se enseña. Cualquier situación que se produzca en el aula, o más en general en la escuela encierran por tanto una enseñanza y generarán un aprendizaje, desde cómo se controla puntualidad, hasta cómo se califica un examen, pasando por recreo y por cada rincón de la escuela. Este principio es así porque la enseñanza es una situación de comunicación y, ya lo afirma la Gestalt, no es posible no comunicar. Una vez que una situación de comunicación se ha establecido esta se produce necesariamente. Al menos se va a comunicar que no se quiere comunicar, lo que implica además un no reconocimiento del otro sujeto como capaz de comunicación, un ninguneo de la otra persona. La educación es comunicación y se da cada vez que se produce una comunicación humana, cada vez que un ser humano establece una relación. La educación se da en relación y una vez establecida esa relación no puede no darse. Este corolario del principio de que «no hay no aprendizaje» es muy importante que los profesores lo tengan en cuenta. El profesor debe cuidar no solo lo que comunica, lo que enseña, sino la relación misma que se establece. Y yo me atrevo a decir que lo importante es la relación. Una relación sana establece un buen aprendizaje necesariamente. Hay un segundo corolario del principio: el profesor también aprende y si no lo hace la relación no funciona bien, el aprendizaje no se va a producir del modo correcto. Los profesores deben aprender en su clase cada día, no es que pueden, es que deben, porque de hecho aprenden y la situación de aprendizaje rechazado, un profesor que no piensa que aprende, interrumpe el flujo de la relación profesor-alumno, interrumpe el aprendizaje del alumno. Por tanto el buen profesor se conoce porque va cada día a aprender a su clase.
sábado, 4 de abril de 2015
Viaje al centro de ti mismo: El autoconocimiento emocional
Todos hemos soñado, en algún momento, con ser los protagonistas de los viajes y aventuras de las novelas de Julio Verne pero, ¿habríamos tenido valor para ello?. El autoconocimiento emocional (o el conocimiento de uno mismo) es la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, y constituye un factor esencial en la inteligencia emocional. Es una especie de "Viaje al centro de ti mismo". ¿Te atreves? Nuestras emociones pueden proporcionarnos información valiosa sobre nosotros mismos, sobre otras personas y sobre determinadas situaciones. Si escuchamos la información que nos proporcionan las emociones, podemos modificar nuestras conductas y pensamientos con el fin de transformar las situaciones. Y no me refiero únicamente al ámbito personal, las emociones desempeñan también un papel importantísimo en el ámbito laboral. De la ira al entusiasmo, de la frustración a la satisfacción, cada día nos enfrentamos a emociones –propias y ajenas- en el trabajo. La clave está en hacer que nuestras emociones trabajen en beneficio propio, de modo que nos ayuden a controlar nuestra conducta y nuestros pensamientos para obtener mejores resultados. El autoconocimiento emocional (o el conocimiento de uno mismo) es la capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en que aparece, y constituye un factor esencial en la inteligencia emocional. Ser consciente de uno mismo es ser consciente de nuestros estados de ánimo y de los pensamientos que tenemos acerca de esos estados de ánimo. ¿Recordáis “Las 12 características de una persona emocionalmente inteligente” que vimos en el anterior artículo? Pues bien, los cuatro primeros puntos de aquél corresponderían precisamente al autoconocimiento emocional o conocimiento de uno mismo, que posibilita adquirir agilidad y habilidad en observarse y conocerse a sí mismo, reconociendo las emociones y los sentimientos según se van desarrollando. “De todos los conocimientos posibles, el más sabio y útil es conocerse a sí mismo” - William Shakespeare Se perfilan tres estilos de personalidad según la forma de atender o tratar las emociones: las personas que son conscientes de sus propias emociones, las personas atrapadas en sus emociones y aquellas que aceptan sus emociones con resignación. La persona consciente de sí misma es consciente de sus estados de ánimo. Son personas que conocen bien las facetas de su personalidad, saben qué están sintiendo y por qué, comprenden los vínculos existentes entre sus sentimientos, pensamientos, palabras y acciones, conocen el modo en que sus emociones influyen en su rendimiento. Son conscientes de sus puntos fuertes y de sus debilidades. Son sensibles al aprendizaje de la experiencia, a los nuevos puntos de vista, a la formación continua y al desarrollo de sí mismos. Y, muy importante, están abiertas a la crítica sincera y bien intencionada y cuentan con un sentido del humor que les ayuda a tomar distancia de sí mismos. Las personas atrapadas en sus emociones son personas que se sienten desbordadas por sus emociones, por tanto muy volubles a ellas y que en ocasiones sienten que no pueden controlar su vida emocional. No son muy conscientes de sus sentimientos, por lo que no saben actuar para tratar de evitar la negatividad. Pueden llegar a ser prisioneros de sus estados de ánimo. Las personas que aceptan resignadamente sus emociones son personas que perciben con claridad lo que están sintiendo y aceptan sus estados de ánimo sin tratar de cambiarlos. En este caso el perjuicio no está en la aceptación del sentimiento, sino en la inacción posterior para reconducir su estado emocional. Precisamente, el autocontrol emocional propone reconocer, dirigir y canalizar las reacciones emocionales intensas. El objetivo consiste en mantenerse en un clima emocional donde las emociones no lleguen a traducirse en una conducta indeseada. Para ello, el proceso pasa por: Tomar conciencia de la emoción que se está experimentando. Dar nombre a la emoción. Es muy útil para que la persona pueda adueñarse de su propio sentimiento. Aceptar el sentimiento, liberándolo de valoraciones o juicios prematuros. No olvidemos que nadie puede ser juzgado por un sentimiento sin más. Integrar el sentimiento como parte de uno mismo y aprovechar su energía en la elaboración de una conducta deseada, acorde con la auténtica motivación que tengamos para actuar e incluso los propios valores. De ninguna manera perseguimos anestesiar los sentimientos con idea de poder reprimirlos, entendiendo erróneamente el “autocontrol” descrito por Goleman: “La clave de la regulación emocional radica en mantener en jaque las emociones angustiosas; si son desmesuradamente intensas y se prolongan más de lo necesario, resquebrajan la propia estabilidad. (…) Una sana maduración personal no pasa por eliminar los sentimientos angustiosos, sino por aprender a detectarlos y tratarlos adecuadamente” El autoconocimiento es la capacidad de ser consciente de nuestras fortalezas y áreas de mejora (o limitaciones), lo que incluye también darse cuenta del impacto que nuestras acciones y reacciones pueden tener en los demás y en qué medida les afectan. También implica aprender a ser vulnerable y admitir que no se tienen todas las respuestas ni la habilidad para resolverlo todo. En un momento dado, a todos nos ha ocurrido que una emoción parece apoderarse de nosotros, sintiéndonos arrastrados por una especie de animal salvaje a una velocidad increíble, hacia un destino desconocido. Pero, si prestamos atención, las experimentaremos en planos más sutiles, mucho antes de que surjan con tanta fuerza, tanto a nivel mental (pensamientos recurrentes, diálogo interior) como en el plano más físico (dolores, somatización, etc.). Las personas que no reconocen sus sentimientos se encuentran en tremenda desventaja. En cierto sentido son “analfabetos emocionales”. Se trata de ser conscientes de lo que sentimos, pero también de cuándo y por qué lo sentimos. “Permitidme que comparta algo personal. Hace unos años tuve un problema de salud grave. De hecho tardé más de dos años en “volver a ser yo misma” y retomar mi vida anterior. Durante ese tiempo, en el que llegué a estar muy limitada físicamente, empecé a escribir. Nunca había escrito con anterioridad. Empecé a escribir libremente cualquier cosa que me acudía a la mente, rápidamente y sin detenerme. La idea era dejar que mi conciencia fluyera. Sin criticarme, sin juzgarme. Era una especie de diario personal en el que no había reglas, ni de contenido ni de formato. Empecé a escribir poesía. Recoger los pensamientos y sensaciones que rodeaban mis estados emocionales resultó ser de gran ayuda. ¿Creéis en las casualidades? Yo prefiero llamarlo azar. Justo cuando empezaba a retomar mis actividades me invitaron a participar en el proyecto del libro “27 de septiembre: un día en la vida de las mujeres”, en el que 29 mujeres escribían (o describían) en forma de diario personal lo que les acontecía o acudía a su mente en un mismo día. Veintinueve existencias diferentes de veintinueve mujeres distintas. Continuo escribiendo, claro. Cuando analizo el día intento destacar especialmente los aspectos positivos (acordaros de mi anterior artículo “Fijar las experiencias positivas”). En ocasiones utilizo el método de escritura “automática” o “fluir de la conciencia”, en otras estructuro una especie de diálogo en respuesta a preguntas específicas, sentimientos o hechos que hayan tenido lugar durante el día. Aquí nació también la idea de “Mover los Sentimientos” como herramienta para trabajar con nuestras emociones y sentimientos. Tengo el juego en la mesita de noche. Después de ese proceso de escritura y/o diálogo extraigo una carta. Anoto cuál ha sido la carta extraída y, tras leer las Pistas y Simbología correspondientes en el dossier de trabajo, analizo las posibles relaciones entre la sugerencia recogida y ese diálogo interno que me ha movido a escribir. Intento anotarlo todo porque la memoria tiene su propia picaresca y, en ocasiones, resulta caprichosamente selectiva. Por eso, y porque si decido marcarme un “objetivo de trabajo emocional” lo repaso 10 minutos cada 24 horas durante los siguientes 7 días. Un diario no es sino la excusa, el motivo aparente de algo que es más profundo: un vehículo para la expresión de los sentimientos y emociones como paso previo para comprenderlas y hacernos psicológicamente más fuertes y, emocionalmente, más inteligentes. Además ayuda a aliviar nuestras tensiones emocionales. Bueno, ya sabéis un poco más de mí.” La inteligencia emocional se puede alimentar, desarrollar y aumentar, no se trata, pues, de una cualidad que se tiene, o no se tiene.
Descubre tu genialidad
¿Estás dispuesto a desarrollar tus habilidades innatas de la mejor manera posible?¿Deseas lograr un conocimiento y desarrollo en tu ámbito que catapulte tu ser a lo más alto? Ser un genio en lo que haces no es algo que esté reservado a un tipo exclusivo de personas con una pericia exquisita y fuera de lo normal. La genialidad es algo que está al alcance de cada uno de nosotros, ya que todos sin excepción, poseemos habilidades, talentos y dones únicos esperando a ser potenciados de la mejor manera. Sin embargo; ¿Por qué la excelencia y la genialidad son aspectos tan poco comunes y desarrollados? Creemos falsamente que el genio nace y no se hace. Pensamos que la genialidad es fruto de un don único y particular que no es susceptible de ser trabajado, interiorizado y aprendido. Construimos una creencia limitante y ficticia, en la cual, elaboramos un binomio que dice: Genialidad = Talento fuera de lo normal. De esta manera, teñimos la genialidad de exclusividad y particularidad. Con este pensamiento, solo unos pocos pueden saborear las dulces mieles que producen sus dones. Por otro lado, a menudo juzgamos nuestros dones de manera equivocada, haciendo alusión o referencia a un campo que no es de nuestra especialidad. Pensamos, por ejemplo, que si no somos buenos en todo lo que tenga que ver con la inteligencia lógico-matemática no podremos satisfacer las demandas de otros campos, porque hay una inteligencia que “cojea”. Albert Einstein tiene una cita que refleja magistralmente esta visión: “Todos somos genios. Pero si juzgas a un pez por su habilidad de trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil”. Todos tenemos habilidades innatas que destacan sobre otras; cada uno de nosotros posee la capacidad de alcanzar la maestría y excelencia en su campo. La pregunta que surge ahora es: ¿Cómo materializar esa posibilidad? El primer paso consiste en indagar y buscar cuál es nuestro don natural y en qué destacamos realmente. La manera de captar ese don consiste en tomar conciencia de cuáles son las tareas que nos producen un estado de flujo y satisfacción particulares. Una vez hallado ese estado, debemos concentrarnos en ese ámbito y habilidad con la inquebrantable decisión de mejorar en ella diariamente, poniendo todas las ganas y visión en el don que se desea mejorar y crecer. ¿Crees que el éxito de los mejores genios en sus campos fue el simple producto de un don natural? Por supuesto que no fue así. Si miras la clase, la elegancia y la técnica que posee Roger Federer, puedes pensar equivocadamente, que el ya poseía todo ese abánico de recursos. Sin embargo, para alcanzar tal nivel de maestría Roger tuvo que implementar una fórmula que es extrapolable para cada uno de nosotros, esta fórmula tiene cinco componentes: Voluntad + pulir y acotar tu talento + dedicación + mejora diaria + tiempo.
1. Voluntad La voluntad supone el requisito previo para manifestar y progresar en nuestras habilidades innatas. Saber que podemos marcar la diferencia, y estar decididamente convencido de conseguirlo es clave para alcanzar la maestría.
2. Pulir y acotar tu talento Tenemos que ser específicos y enfocar la concentración en nuestro campo. Intentar generar un valor añadido en las acciones que emprendemos. Hacer de nuestro talento algo propio, y pulirlo adecuadamente cada día.
3. Dedicación Debemos dedicarnos en cuerpo y alma a nuestra tarea. Ser conscientes de que estamos haciendo todo lo posible para producir un progreso consistente. Establecer un plan de acción masivo que nos ayude a canalizar debidamente nuestras energías, para así generar grandes resultados.
4. Mejora diaria Es importante establecer pequeñas mejoras cada día en relación a los hábitos, comportamientos y actitudes relacionados con nuestro talento. Sentir que cada día ha sido debidamente aprovechado, y que nuestro talento está perfeccionándose son grandes alicientes para nuestra autoestima y convicción.
5. Tiempo La paciencia y el tiempo son dos aspectos indispensables para poder plasmar nuestro talento con el mayor éxito y efectividad. Debemos ser conscientes que las cosas llevan un proceso determinado de resolución y asentamiento. El tiempo es el valedor principal de nuestro esfuerzo diario, y los frutos resultantes van en directa consonacia con la persistencia dedicada día a día. Descubre en que destacas, en que eres un genio, y trabaja incansablemente para modelar tu visión. Encuentra ese talento que produce que el tiempo se disipe y desaparezca. Trabaja y brinda el máximo en cada día para llevar tu habilidad a la cumbre de tus posibilidades. El mundo necesita más genios entregados y capaces de dar lo mejor de sí mismos. Personas comprometidas con un alto estándar de valores. Empieza HOY mismo a desarrollar ese gran talento, no lo desperdicies.
“El genio se compone del dos por ciento de talento y del noventa y ocho por ciento de perseverante aplicación”
¿Cómo supervisar la práctica docente.
El problema es que en la mayoría de centros educativos hay un solo director y por lo menos 20 salones de clase, sin contar todo el papeleo que se debe llenar a diario para satisfacer el hambre de informes de las autoridades educativas. Un solo director o directora no es capaz de dedicar el 50% de su tiempo para asegurarse que la enseñanza que reciben los niños es la que se espera. No hay tiempo. Este es un fenómeno mundial. Los directores deben hallar tiempo para hacer lo que verdaderamente importa, asegurarse que la escuela está alcanzando los objetivos por los que existe. La caminata de los tres minutos por el salón de clases es un método interesante de 5 pasos para supervisión escolar y le llamo “La caminata de los tres minutos por el salón de clases”. Yo parto de la premisa que ningún director o directora tienen suficiente tiempo como para ir a sentarse al salón de clases y realizar una supervisión exhaustiva, eso es trabajo de los coordinadores, subdirectores, jefes de departamento, etc. Antes de iniciar nuestra caminata debe existir una condición importante. Todos los profesores y estudiantes deben estar sabidos que cuando el coordinador llegue al salón de clases, estas no deben interrumpirse, todo debe continuar como si nada. El coordinador tampoco hablará ni con el profesor ni estudiantes y no saludará ni le saludarán. Tampoco debe llevar libreta para hacer apuntes. La caminata buscará responder a 5 preguntas: ¿Están los estudiantes y profesor prestando atención al contenido?;
¿Los contenidos están alineados a la programación?
¿La instrucción está alineada a la programación?
¿Existe evidencia de aprendizajes previos?
¿Existen riesgos para la seguridad de los estudiantes y profesores?
Iniciemos la caminata entonces:
Paso 1: ATENCIÓN ¿Están los estudiantes y profesor prestando atención al contenido? ¿Los estudiantes le están prestando atención al profesor, los materiales didácticos, sus textos o a sus compañeros? ¿El profesor o profesora está atento a sus estudiantes?
Paso 2: ALINEACIÓN ¿Los contenidos están alineados al Programación? ¿Lo que están haciendo está alineado a la planificacion curricular? Aquí es donde son tan útiles las planificaciones diarias, mensuales y anuales. Todo centro educativo debería tener un formato donde se evidencie lo que los estudiantes deben hacer cada mes, cada semana y por supuesto cada día. El director debe tener una copia de la planificación diaria del profesor de cada curso con el objetivo de asegurarse que las acciones dentro del salón de clase están alineadas a la planificacion curricular.
Paso 3: OBJETIVO ¿La instrucción está alineada al programación? ¿El diseño de la instrucción corresponde a esos objetivos? ¿La forma en que el profesor planificó su clase es la más adecuada? No basta que el contenido y las acciones estén alineadas al planificación curricular anual del centro, las acciones que están realizando ahora mismo se alinean al objetivo de aprendizaje. La manera más fácil es asegurarse que la tarea que están haciendo ahora mismo los estudiantes se corresponde con el objetivo de aprendizaje.
Paso 4: APRENDIZAJE PREVIO ¿Existe evidencia de aprendizajes previos? ¿Qué enseñanzas previas fueron necesarias para realizar la tarea actual? Es decir, si vemos que la mayoría de alumnos no tiene dificultad para hacer su trabajo, significa que la enseñanza en los meses o semanas anteriores fue buena porque sentó las bases para que hoy puedan hacer este trabajo. Si están teniendo problemas entonces hay que revisar si los aprendizajes previos y necesarios fueron alcanzados. Paso 5: SEGURIDAD ¿Existen riesgos para la seguridad de los estudiantes y profesores? Revise que no hay ningún peligro para los estudiantes o profesores, de un vistazo a las paredes, pupitres, cátedra y cualquier otro lugar que pudiera representar un peligro para los alumnos y docentes. Muy importante! En este momento no hablamos con el profesor, cualquier observación la haremos en la oficina y con el profesor o profesora a solas. (a menos que exista un potencial peligro) Por supuesto que las primeras veces nos va a costar un poco tener en mente estos pasos pero con un poco de esfuerzo podremos lograrlo.
Razones para la esperanza
A fines del año 2013 la ubicación del Perú en la prueba PISA 2012 nos mostraba que los estudiantes que empezaron su escolaridad el año 2002 estaban en una situación crítica: el Perú aparecía en el último lugar. En realidad, la fotografía completa de esos resultados mostraba que respecto a los países participantes en PISA estábamos en el último lugar tanto en rendimiento estudiantil como en inversión por alumno. Así, la explicación de los resultados es clara: con una inversión por alumno por debajo de los US$ 1,000 no podemos jugar en las “grandes ligas” de la educación mundial. Y como incansablemente repite el Ministro Saavedra, esa baja inversión en educación es una limitante estructural para el avance del Perú en educación y será un freno para el crecimiento económico y el desarrollo. Cabe decir, además, que con una inversión tan baja las posibilidades de ingresar a la OCDE son bastante remotas. El año 2014 sin embargo nos trajo una noticia interesante y poco difundida: los resultados de la evaluación latinoamericana de educación (TERCE) nos mostraban que entre 15 países de la región el Perú empieza a mostrar desempeños educativos por encima del promedio latinoamericano. El Perú fue el país que más había progresado en matemáticas en tercer grado, y en ciencias en sexto, y también habíamos logrado progresos significativos en lectura (tercero y sexto grado) y en matemáticas (sexto grado). Así que en el concierto latinoamericano ya pasamos a “media tabla” dejando los últimos lugares de evaluaciones anteriores. La última evaluación censal de estudiantes del Perú aplicada en segundo grado de primaria ratifica los progresos existentes: los estudiantes que empezaron su escolaridad durante el actual gobierno mejoraron sus rendimientos en 11 puntos en comprensión lectora y en 9 en matemática. La educación pública alcanzó los rendimientos de la privada en matemática. Y hay mejoras significativas también en áreas rurales y en la población quechua, aymara y amazónica.
¿Porqué se mejoró? Si el presupuesto de educación hasta el año 2014 permanecía en el rango del 3% del PBI sin moverse desde el año 2002, ¿a qué se deben estos progresos? Es fundamental destacar, en primer lugar, lo que denomino el “factor S”, el factor subjetivo o motivacional. A pesar de las condiciones difíciles y muchas veces precarias en que trabajan los profesores, muchos de ellos se han “comprado el pleito” de los aprendizajes. Además, han sido tratados con respeto por el Ministerio de Educación y recibido apoyo directo para su labor en aula. El mérito principal y primero de la mejora es de los profesores y directores de los colegios públicos del Perú. El otro gran factor es la existencia de una política sistemática y articulada durante el actual gobierno.
El primer tiempo del gobierno, con la gestión de Patricia Salas, la acción del Ministerio de Educación se estructuró en tres pilares: aprendizajes, desarrollo docente y gestión moderna y descentralizada. Su lema fue: “Todos pueden aprender y nadie se queda atrás”, y la gestión estuvo marcada por un fuerte énfasis en la atención a los más excluidos en el sistema educativo: la educación inicial, la educación en áreas rurales, la educación bilingüe intercultural y estudiantes con más dificultades de aprendizaje. Patricia Salas pagó el costo político de haber logrado incorporar a todos los profesores en una carrera magisterial meritocrática y de haber realizado acciones estructurales pero poco espectaculares. Los niños más pobres o la construcción de pequeñas escuelas rurales (una al día!) no dan réditos políticos suficientes.
El segundo tiempo del gobierno con la gestión de Jaime Saavedra organiza la política educativa en cuatro pilares agregando a los antes mencionados el pilar de la infraestructura. El lema actual es: “rumbo a la nota más alta” y la decisión de impulsar a la excelencia al conjunto del sistema educativo es su rasgo distintivo. La implementación de políticas universales y no focalizadas sustentadas en un inédito incremento del 0.5% del PBI que se ha prometido será equivalente el 2016, y una estrategia para una ejecución impecable del gasto son rasgosque caracterizan a la gestión actual. Debe destacarse algunas constantes en la política educativa del actual gobierno:
- La política educativa ataca simultáneamente varios frentes de la problemática educativa por lo que no puede decirse que una sola acción explica los buenos resultados: estamos ante un cambio sistémico.
- Se trabaja sobre políticas universales que buscan atender al 100% de los estudiantes y no sobre proyectos pilotos. Y se busca acelerar su implementación. Sin embargo, las brechas son tan grandes que varias tomarán hasta el 2021 para universalizarse.
- Se recupera la rectoría del Ministerio de Educación en educación: de cara a los gobiernos regionales la estrategia integubernamental y de gestión descentralizada afirma el liderazgo del Ministerio y a la vez empodera a los gobiernos regionales en las funciones que les competen. Por eso puede verse cómo hay un número importante de gobiernos regionales que han hecho de la educación una prioridad y hoy exhiben mejoras importantes. La rectoría se extiende ahora a la educación superior, a partir de la aprobación de la nueva Ley Universitaria, lo que resulta indispensable para asegurar la calidad de este estratégico nivel educativo. - Existe una clara opción por fortalecer la educación pública. El Ministro Saavedra ha desoído los cantos de sirena de quienes piden la entrega de los colegios a empresas educativas privadas. La evidencia internacional hace tiempo ha demostrado que una sólida educación pública es la base de la mejora educativa lo que no quiere decir que el sector privado no tenga un rol y muy importante. Las alianzas público privadas para enfrentar la brecha en infraestructura educativa y gestionar la educación técnica son una tarea de magnitud para el sector empresarial, el cual empieza a responder a la altura de estos desafíos.
- Existe una prioridad clara por la revaloración del docente al punto que los ministros Salas y Saavedra podrían fácilmente parecer representantes del magisterio, abogando permanente por la revaloración del profesorado, un trato profesional y con respeto, el incremento de remuneraciones con una base democrática. La implementación del primer tramo de la carrera pública magisterial ha supuesto una inversión del Estado de más de 2 mil 500 millones de soles en remuneraciones. Y sin embargo, el propio Ministro Saavedra señala que esto es insuficiente. La meta planteada el primer día de clases por el Presidente de la República de duplicar la remuneración de los docentes al 2021 los pondría por encima del promedio latinoamericano actual.
- 6% del PBI a educación, con una señal clara del gobierno para este año 2015 donde se está pasando de 3.0% a 3.5 % del PBI. Los incrementos presupuestales hasta el 2021 necesitan ser previsibles y dedicar una porción significativa a la revaloración docente. Propuestas para seguir mejorando Existen por supuesto, oportunidades de mejora. Señalo tres:
1. Profundizar las políticas de equidad en favor de la población rural, los estudiantes con discapacidad, los que no culminan su secundaria. Si el profesor mejor pagado es el de los Colegios de Alto Rendimientos, luego le siguen los profesores que hacen acompañamiento pedagógico en áreas urbanas y al final están los que apoyan los colegios rurales, estos últimos quedarán desatendidos. Del mismo modo, si no se ponen en marcha experiencias de excelencia para la secundaria rural como los Colegios en Alternancia, que tienen bien probado su éxito ¿dónde estudiarán los adolescentes de áreas rurales una secundaria que les sea realmente útil? ¿Porqúe no se da impulso a estas expeiencias que fácilmente podrían ser unos “COAR rurales”?
2. La culminación de un nuevo marco curricular sintético y preciso donde los profesores encuentren con claridad lo que deben enseñar en cada grado. Se ha hecho un gran esfuerzo en ese terreno que corre el riesgo de quedar trunco.
3. La innovación y la investigación: un país de ingresos medios con un sistema educativo sin una estrategia de innovación y desarrollo está condenado a repetir sus errores: si de los 9.658 millones de soles que maneja el Ministerio de Educación se dedicara el 1% a investigación e innovación se estarían sentando las bases de una mejora sostenida de la educación en el Perú. Un rumbo consensual al Bicentenario de la Independencia del Perú.